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Tres meses no son nada comparado a una vida.  Es como un piedrita en la playa, un tiempo corto y insignificante. Vivirás mucho mas, experimentaras mucho mas, sentirías mucho mas a lo largo de tu vida que en tres meses. Tres meses no definen tu vida.

Sin embargo, cuando una vida depende de ti, esos tres meses se sienten diferentes. Un ser tan vulnerable que sin ti moriría. El tiempo es mas valioso y sientes que tu vida tiene más valor, de ti depende la del otro. Stan había experimentado nuevas sensaciones eh emociones que no había sentido antes en esos tres meses con Ellie que en toda su vida. Un amor puro eh incondicional, ella lo amaba solo por ser el.

Pero eso solo hacía las cosas más difíciles.

—Ellie, di "papi"— Kenny se apuntaba a sí mismo mientras repetía una y otra vez la misma palabra. Ellie estaba sentada en el suelo, sobre un tapiz de juguetes y con unos bloques de colores frente a ella.

—Que hay de mi?— Stan se acercó a ellos y se sentó cerca. Imitó los gestos de Kenny y comenzó a apuntarse a sí mismo. — Puedes decir "papá", di "papá"—

La pequeña sonrisa ampliamente mirando a ambos chicos. Ella disfruta con la atención de ambos. Rápidamente comenzó a agitar su cuerpo de un lado a otro mientras daba saltitos donde mismo estaba sentado como en una clase de "baile".

—Uuh estas bailando?— dijo entre risas Marsh al verla tan feliz.

Kenny soltó un suspiro sentandose cruzando las piernas. Tomo libro que tenía a la mano de guías de padres primerizos. —Eso es raro, ya tiene 7 meses debería gatear, poder decir "papá" y tener dientes!! Crees que este enferma?! Deberíamos llevarla a un doctor?!—

—No la presiones, deja que se desarrolle a su ritmo— Stan tomo a El y la coloca sobre sus rodillas, quería ver si es que ella se llegaría a mover pero la niña solo se quedaba parada mirando a ambos. —No quieres gatear?— tomó sus manitas y las movió enseñandole los movimientos básicos del gateo. Sin embargo ella frunció el ceño haciendo una expresión de enojo. Enseguida Stan la soltó. —Vale, vale, perdona—

—Aaah!– Kenny dejo caer el libro y se tiro de los cabellos. —Que estoy haciendo mal!?— el chico se dejo caer de espaldas al suelo, extendiendo todo su cuerpo en estrella.

—Te lo estas tomando muy personal, deja que lo haga a su tiempo. Un libro no puede decidir el desarrollo de cada niño—

Golpes frenéticos en la puerta principal llamaron la atención de todos en esa pieza. Stan se levantó y se dirigió a la entrada para abrirla puerta.

—Tio! Lo logre!!— Grito Kyle emocionado al momento que la puerta fue abierta. El entro a la casa como si fuera propio exaltado de la emoción.

—Que? Que lograste?— Preguntó su mejor amigo, mirándolo confundido.

—Logre que cancelaran el proyecto!— Volteo a verlo con una enorme sonrisa en el rostro. Después de toco cancelar un proyecto gubernamental por si solo no era cosa fácil.

La expresión de Stan cambió de inmediato. Miedo, asco, furia. Una gran mezcla de emociones negativas. —Que mierda hiciste?— preguntó de un tono frio.

—Vamos amigo, no fue fácil. Tú eres múltiples reuniones, mucho papeleo y mucha investigación— 

—Que MIERDA hiciste!?— Volvió a preguntar con mas fuerzas esta vez.

Kyle se percato de lo ocurrido. Hizo las cosas lo mas rápido que puedo, pero por lo visto había tardado demasiado. Se cruzo de brazos y suspiro decepcionado. —Es lo mejor.—

—Lo mejor?! Para quien!!?— Stan se acerco agresivamente a su amigo pero el no se inmuto.

—Unos niños no pueden cuidar de un niño— Le respondió fríamente.

—Niños?!— Stan tomo a Kyle del cuello y acerco a el bruscamente.

—Stanley Marsh?— una tercera voz se hizo escuchar en la habitación. Stan volteo percatándose que había olvidado cerrar la puerta.

Y ahí estaba. Ese mismo hombre de negro de hace tres meses.

—Se cancelo.—

—No— Stan soltó lentamente a Kyle volteando hacia el hombre con una expresión de terror. —Por favor, no— su voz temblorosa, no se podría decir si era de miedo o dolor.

—Lo siento Marsh. Se cancelo. Devuelvan a la niña.—

—Ustedes bastardos no pueden llegar un simple día y darnos una huérfana como si fuera un simple objeto y luego quitárnosla!!— Stan trato de acercarse al hombre pero fue detenido por Kyle quien lo sujetó con sus brazos pasándolos por debajo de sus axilas. —SUELTAME!— Gritaba con fuerza mientras se agitaba bruscamente de un lado a otro para liberarse.

—Stan!! Quieres dejar de ser un maldito egoísta por un segundo!!? Ustedes no tienen la capacidad ni las habilidades de cuidar una niña!! No le pueden dar lo que se merece!!—

—Y que es lo que se merece!? Una vida en un asqueroso orfanato con millones de otros niños con guardianes incapaces de darle la atención que necesita?!—

—Un hogar! Una oportunidad de ser adoptada por personas que la amen y sepan guiarla al difícil camino de ser un adulto!! Que sabes tú de la vida adulta si aun vives con tus padres?!—

—Yo MATARÍA por esa niña!! SUELTAMEE!— Stan se iba poniendo mas y mas agresivo con cada palabra que le decía su amigo. Tenía la impresión de ser incomprendido.

El hombre de negro suspiró al ver tal escena. No quiso ver mas de su show y adentro a la sala sin permiso. Aun podía escuchar los gritos del chico de fondo cuando entró a la sala.

—Kenneth Mccormick?—

Kenny volteo hacia el hombre, con una expresión difícil de expresar. Pero sus ojos trasmitieron un dolor tan profundo que ninguna palabra podría describir. Él había escuchado todo.

—Se canceló—

—Es porque no sabe gatear?— De sus ojos cayeron lagrimas y sus gemidos ahogados entre cada palabra le impedían expresarse bien. —Si espera unos días más y-yo le puedo enseñar—

—Lo lamento— el hombre se acercó a ellos tomando la niña en brazos.

Kenny sujetó las ropas del hombre. No lo quería dejar ir pero que podía hacer el? Que se supone que debía hacer cuando no tenía ningún poder legal, financiero o legislativo?

Ellie expresó su desagrado al ser tomada por extraño frunciendo el ceño. Soltó un balbuceo en forma de quejido y con sus manos apuntaba hacia Kenny dejando entender que ella quería estar con el.

El hombre de negro le dio un empujón a Kenny liberándose de su agarre. El chico se sentía tan impotente que le era incapaz de moverse. Solo estaba tirando en el suelo ahogándose en su propio llanto.

Mientras mas se alejaban, los quejidos de Ellie si hicieran mas fuerte hasta desbordan en un llanto.

El hombre cruzo la puerta cerrándola tras de el. Tratando que ellos no la escucharan mas. Stan aún podía oír sus llantos y se siguió debatiendo.

Sus llantos se oían cada vez más lejanos con cada segundo que pasaba y lo último que escucho antes de perder el amor de su vida fue:

—Papá!—

Papás ♡ (Stenny)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora