En la mañana me levante por las ganas de ir al baño, toque la puerta por las dudas y no había nadie, entre y cerré detrás de mi.
Luego de hacer mis necesidades me miré en el espejo, abrí los ojos en grande al notar las marcas en mi cuello, en ese instante me acorde de Tom y sus palabras.
Si vos mañana llegas a venir con marcas en el cuello le rompo la cara al rubio ese. . .
Rápidamente fui por mi mochila, tome maquillaje e intenté tapar estas, pero no funcionaba, se notaban de todos modos, empeze a desesperarme, no quería que le pase nada a Mati.
Después de horas me rendí, salí del baño y dejé las cosas en su lugar, al salir del pasillo me encontré con mati sentado en el sofá.
—Hola Adri— sonrió.
Forze una sonrisa, estaba nerviosa, no quería volver a la casa de Tom, no haci —¿Oye estas bien?— pregunto.
—Eh si. . . Solo estaba pensando en algo— respondí.
—Bueno, te iba a decir que tengo que llevarte ahora porque tengo una reunión de trabajo— se levanto del sofá.
Mierda
—Bueno— dije.
Ambos empezamos a caminar en dirección a la puerta principal, Mati abrió esta dejándome salir primero, atrás mio salió el.
(...)
Al llegar a la casa de los gemelos di golpes en la puerta, trate de taparme las marcas con el suéter que traía puesto.
La puerta se abrío lentamente, y ahí estaba él, Tom. Me miró de arriba hasta abajo, sin decir nada se corrió a un costado dejándome pasar.
Sin pensarlo dos veces entre, mientras Tom cerraba la puerta trate de subir las escaleras para ir a mi habitación, pero su voz me interrumpio.
—Adriana— hablo.
—¿Si?— pregunte.
—Ven aquí— exigió.
Solté un suspiro antes empezar a caminar hacia él, levante un poco mi cabeza para mirarlo. Su mirada era fría, no demostraba ningún sentimiento.
Lentamente subió una de sus manos hasta mi cuello, ahí fue cuando mis nervios empezaron a aumentar, mis manos sudaban y mi corazón latía rápidamente.
Al sentir su toque sobre mi, se me pusieron los pelos de punta, formando un escalofrío por todo mi cuerpo.
Lentamente movió mi suéter dejando las marcas a la vista. Vi como su mandíbula se tensaba, sus manos se hicieron puños marcando sus venas.
Sin decir una sola palabra, subió a su cuarto, cerrando la puerta fuertemente. Se me hizo bastante raro, confundida subí las escaleras y empeze a caminar hasta su habitación.
Cuando estaba enfrente de la puerta escuché como tiraba cosas al suelo. De un momento a otro esos ruidos ya no se escuchaban.
Lo ignore por completo y entré a mi habitación, me saque el suéter porque tenía calor. Una vez cómoda me tire sobre mi cama.
Mire mi celular un rato hasta que me aburrí, y derrepente me acorde de Eli y Bill, salí de mi habitación entrando a la de Tom.
Como toda olvidadiza que soy no toque la puerta y entré sin avisar, pero Tom no estaba, vi algunas cosas tiradas por el suelo.
Cuando me Gire vi a Tom detrás de mi, estaba sin remera y tenía una toalla envuelta en la cintura. Se había terminado de Bañar.
Mire su abdomen, bien trabajado como siempre, no pierde el físico, me quedé embobada mirandolo.
—Ey— chasqueo los dedos —Deja de mirarme y dime que mierda quieres— hablo enojado.
—¿Donde esta Eli?— pregunte de una.
No quería pelear, no ahora —Se fueron de compras— dijo.
—Ah bueno— sin más que decir salí de su habitación.
Tom
Estaba recostado en mi cama, estaba pensando en las marcas del cuello de Adriana, de tan solo pensar que tuvieron sexo la sangre me hervía de celos.
No tenía planeado hablarle, solo iba a contestarle las preguntas necesarias, hace unos minutos que se había ido de mi habitación.
Ya me había cambiado, aunque me puse algo cómodo, una remera y un pantalón corto, como siempre holgados.
Cuando la vi de espaldas mi mirada bajo a su trasero, y cuando se dio vuelta para mirarme no pude evitar ver sus tetas, y sus labios.
Esos labios carnosos que moria por volver a probar, deseando que no hayan perdido su gusto a fresas, ese era mi gloss favorito, obviamente para ella no para mi.
De tanto pensar en ella mis hormonas se habían despertado, más de los normal, Adriana era la mujer que muchos hombres morirían por tocar, por tenerla a su lado, por besarla. Y solamente había un hombre en la tierra que podía hacer eso, Yo.
Y sin darme cuenta mi amigo se avía despertado, por mi mala suerte era muy notario, necesitaba quitarme las ganas, y sabía perfectamente con quien hacerlo, Adriana.
Que mi orgullo se valla a la mierda, Adriana esta primero y siempre lo estará. Me pare de mi lugar y camine hasta su habitación, antes entrar di leves golpes, entre al recibir un "Pase" de su parte.
Apenas entré me acerque a ella, quería decirme algo pero la interrumpi, la bese, sin importarme nada, para mi suerte estaba acostada en su cama.
Con mis manos empeze a recorrer su hermoso cuerpo, y tocar cada parte de este, apreté sus muslos, el beso era intenso, ella había tardado unos segundos en responder pero finalmente acepto.
Nuestras lenguas jugaban entre sí, nuestros labios encajaban a la perfección, como si estuvieran destinados a estar unidos, y haci será.
Nos separamos por la falta de aire —Tom— hablo. Su voz era agitada.
—Dime— dije mirándola, sus ojos brillaban de lujuria.
—Solo continúa— me miró.
Asentí para después ir dejando un camino de besos por su abdomen, traía puesto un top, lo cual era más fácil para mi.
Al llegar a su entrepierna me detuve para mírala —Puedo— pregunte.
—¡Tom!— grito ella.
La mire confundido —¡Tom despierta!— volvió a gritar.
Rápidamente abrí los ojos encontrándome con Bill —¿Que paso?— lo mire tratándo de procesar las cosas.
—Solo venía a avisar que ya llegamos— dijo.
Solté un suspiro —Esta bien— dije.
Cuando se fue me tape la cara con ambas manos, había tenido un sueño tan realista, yo sabía que todo era muy real para ser verdad.
Lentamente me pare y salí de mi cuarto, baje las escaleras donde ahí estaban los demás, Bill, Elizabeth, Adriana, Gustav y Georg.
Holaaa, con esto finalizó el cap 6, disculpen si es corto, es que para el siete tengo una idea. Y bueno solamente les quería agradecer por el apoyo que estoy recibiendo, no es mucho pero igual gracias, los quiero,❤️
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Hard Love ; //Tom Kaulitz//
Random2007: Tom Kaulitz y Adriana Lima tenian una hermosa relación, o eso pensaba Adriana, lo que ella no sabia es que Tom la estaba engañando con su supuesta mejor amiga, Adri al enterarse sin pensarlo dos veces, armo sus maletas y tomo vuelo directo a L...