Naruto: Un Largo Viaje

CAPÍTULO DIECISÉIS

Estaba haciendo mucho frío, la niebla se hacía más espesa. Era algo frustrante lidiar con otros obstáculos además de la niebla.

Un jonin tiene que tener la mente fría, tenía que estar concentrado en cada misión, cualquier fallo haría que la misión fracasara. Pocos jonin que se mantenían centrados en la misión, es el caso de Kushina; ella estaba luchando con la poca visibilidad y los Mizu Bunshin de ese desertor, también con la preocupación de sus hijos. Estaba pensando en muchas cosas y cometía muchos errores que podían constar la vida si no fuera por Kakashi.

Kushina le iba a dar una patada a un Mizu Bunshin, pero ella no notó lo herido que estaba esa copia de agua. No era una copia, era el Zabuza de carne.
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-*deteniendo la patada con una mano* -te has oxidado, Habanero... Eres débil- *dijo Zabuza con seriedad y una mirada que mataría a cualquiera.*

-no me subestimes!- *Kushina se alejó de él* -aun sigo siendo la misma.-

-si claro. Antes podías con toda una aldea, ahora ni puedes con un desertor de rango C. Se nota que al parir a esos cuatro te paso factura- *Zabuza dio una risa cuando vio la cara de su enemiga.*
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Kushina le iba a responder esa acusación, pero un Mizu Bunshin la tacleo y la derribó al suelo con fuerza. Ella dio un quejido, pero antes de que Zabuza y su Bunshin hicieran algo, aparecieron muchos perros alrededor de los tres.

Un perrito que tenía una bandana y un chaleco azul mordió el cuello al Bunshin, desapareciendolo, el perrito es Pakkun, junto con otros perros de gran tamaño y otros más pequeños que él. Kakashi apareció por detrás de un distraído Zabuza, dándole una patada a su costado, lanzando a Zabuza a varios metros. Los perros lo persiguieron para atraparlo.
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-estas bien?- *pregunto Kakashi.*

-si..., estoy bien- *respondió Kushina, levantándose con algo de dificultad.*
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Kushina miro en al dirección donde se había escuchado el grito de Kentaro y estaba muy preocupada. Ella iba a ir, pero Kakashi la detuvo, no era muy buena opción al ir, el peliblanco ya sabia que Naruto estaba ahí, Kakashiesquivó un kunai...

Después de que Haku haya lanzado sus agujas. Naruto dio un pisotón al suelo, creando una pared, cubriendo a Kentaro y a Sasuke. Mientras que Haku se limpiaba la sangre de su boca y aguantaba el dolor en su estomago.
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-qué haces aquí?! Esta no es tu pelea!- *reclamó Sasuke* -pierdete, idiota!-

-jeje, no tengo una buena razón para salvarlos. Si quiero, puedo dejarlos a merced de esa linda dama, quieres eso?- *Naruto le dio una mirada fría pero a la vez burlesca.*

-nadie puede vencer a un Uchiha, mucho menos esa tipa- *espetó Sasuke con molestia.*

-lo que digas, Uchiha- *Naruto derribó la pared y agarró las agujas con destreza* -oye, Haku, qué ha dicho Zabuza sobre mi propuesta?-

-'cómo sabe mi nombre? Este chico es un misterio. Y no creo que mi acto de ser un chico ya no funciona... Fue divertido hacer eso'- *pensó Haku* -no tengo la obligación de decirte. Las cosas de Zabuza-san no son de tu incumbencia.-