No Regrets - Chewis

El comienzo después del fin

"Es oficial: Tras haberse tomado un receso de la competencia y dejar Mercedes, Lewis Hamilton es el nuevo piloto de Scuderia Ferrari."

"El siete veces campeón del mundo, Lewis Hamilton, deja la escudería alemana y su futuro estará en Maranello, en uno de los movimientos más impresionantes de la historia de la Fórmula 1."

"¿Hamilton no fue capaz de desplazar a Sergio Pérez y ese es el motivo del porque el heptacampeón se va a Ferrari."

El bullicio se hace presente en la sala, puedo oírlo tras las paredes. De un momento a otro todo queda en silencio, se acerca la hora de salir.

—Lewis, ¿cuál es el motivo real de tu retiro temporal de la Fórmula 1 y qué es lo que te hizo querer volver?

—Bueno, creo que para nadie es un secreto mi relación con Sergio, aunque intentamos mantenerla privada precisamente porque no queríamos tener a la prensa encima, no logramos hacerlo en totalidad. Hubo personas bastante influyentes en la Fórmula 1 que se enteraron e interfirieron en nuestra relación con amenazas. No puedo dar mayores detalles porque todo esto se está tratando de manera legal, pero no sólo son las amenazas que recibimos, también recibimos comentarios discriminadores, tan homófobos, racistas y xenófobos. —rasco uno de mis brazos.— Bueno, luego de mi retiro temporal, Fred se comunicó conmigo y me ofreció el puesto, vi la oportunidad y tuve que saber aprovecharla, como dijo Sebastian Vettel, todo el mundo es fan de Ferrari y estoy cumpliendo un sueño que tengo desde niño.

—¿Es difícil dejar Mercedes?

—Dejar Mercedes fue la decisión más difícil que he tenido que tomar en mi vida tras 26 años que me han apoyado. El viaje fue absolutamente increíble juntos. Hemos hecho historia y eso es algo de lo que me enorgullezco mucho. Pero creo que, en última instancia, estoy escribiendo mi historia y sentí que era hora de comenzar un nuevo capítulo.

—¿Qué tiene de especial para ti Ferrari?

—Creo que probablemente todos nos sentamos en nuestro garaje y vemos aparecer en la pantalla de la televisión al piloto en la cabina roja y te preguntas cómo sería estar rodeado de color rojo. Vas al Gran Premio de Italia y ves los Tifosi y eso te deja asombrado. Además, creo que para todos los pilotos que crecimos mirando la historia de Ferrari, recordamos a Michael Schumacher en su mejor momento con Ferrari. Incluso cuando era niño, solía jugar a ser Michael en ese coche, así que definitivamente es un sueño y estoy muy, muy emocionado por ello.

—¿Cómo se tomó Toto la noticia?

—Nuestra relación no era jefe y piloto, antes que eso nosotros dos somos amigos. A pesar de que le tomó por sorpresa la noticia, supo llevarla de buena manera y sé que tengo su apoyo en las decisiones que tomo. Quizás ya no nos veremos mucho en el paddock, pero fuera seguiremos siendo los amigos que siempre hemos sido desde el primer día en el que comenzamos nuestra historia.

—¿Te molesta que Checo te haya reemplazado en Mercedes y te haya quitado el puesto?

—Todo lo contrario, me alegra que Checo haya llegado a una escudería y a un equipo que le dé el valor y respeto que se merece como piloto y persona. En algún momento lo dije, su antiguo equipo no lo ayudaba del todo. A pesar de que a Red Bull lo conforman muchas personas, habían personas en particular que lo afectan psicológicamente  y no lo apoyaban. Era un ambiente complicado para él, a pesar de que supo lidiar con ello. Sin embargo, creo que para nadie es agradable estar escuchando cada fin de semana cosas negativas sobre ti. A pesar de que nunca viví lo que él pasó, como piloto y su pareja fui testigo de lo difícil que fueron las presiones psicológicas y mentales y no creo que me haya quitado el puesto, Checo llegó en un momento difícil para Mercedes que fue cuando decidí irme y ganó su primer campeonato y el segundo puesto en el de constructores con pocos puntos de diferencia cuando en ese año todo iba a favor de Red Bull. El año pasado hizo un gran año, ganando su segundo campeonato y el de constructores después de la era Verstappen. Así que más que sentirme mal, me siento feliz de lo que ha conseguido, este es un deporte muy demandante, por lo que algo que admiro de Checo es la capacidad que tiene para reponerse, levantarse y seguir intentando.

—¿Estás preparado para aprender italiano?

—Solo hablo dos idiomas, inglés que es mi lengua materna y español, pero definitivamente lo intentaré. Recuerdo que cuando practicaba Karting en Italia aprendí algo, así que supongo que todo aquello volverá a mi pronto, o eso espero.

—¿Tu relación con Sergio cómo está ahora?

—Bien, somos personas adultas que podemos sentarnos a hablar y solucionar nuestros problemas, lamentablemente hubieron terceros involucrados que provocaron un gran malentendido, pero pudimos solucionarlo. Ahora estamos felices viviendo nuestra relación, creo que ya es momento de que la gente entienda que una cosa es nuestra vida en el paddock y otra muy diferente es nuestra vida personal, mientras esto no afecte los resultados en la competencia, lo demás no debería ser tema para los demás. Pero si se lo preguntan, estamos bien, estamos felices y creo que eso basta y sobra.

Por fin la entrevista llega a su fin luego de un par de preguntas a Fred y Charles que creo que están igual de cansados que yo. Lo único que quiero es irme de ahí y llegar al hotel a descansar entre los brazos de Checo.

—¿Ya te vas? —pregunta Charles.

—Sí, es que Checo me está esperando en el hotel.

—No sé si te dijo Fred, pero mañana hay una comida demasiado importante a la que no puedes faltar por nada del mundo.

—¿Es en un restaurante de aquí cerca de aquí o en donde?

—Ojalá lo fuera, pero está al norte, tres horas y un poco más de viaje en coche.

—Ok, le diré a Fred que me envié la dirección.

—No, pero yo lo hago, me entregaron las invitaciones pero las olvidé en casa. —sonríe.— Pero te mando la ubicación, nos juntamos y entramos juntos.

—¿Es solo una invitación? Es que para ver si puedo llevar a Checo.

—Si, es sólo una. Pero puedes llevarlo, puede quedarse en un hotel, cafetería, cualquier cosa y pueden recorrer el lugar luego.

—Bueno, veré si quiere ir. Gracias, Charles, nos vemos mañana. —doy suaves golpes en su hombro y salgo en dirección al hotel.