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Ya finalizada la clase, el profesor Yaga llama a Satoru y Suguru para informar sobre su próxima misión, al parecer ellos ya estaban acostumbrados, por lo que inmediatamente comenzaron a planear como lo harían, hasta apostaban y discutian sobre los posibles resultados. Por otro lado, Agatha había observado toda la situación, sintiendo una suerte de inquietud al verlos tan seguros de sí mismos y con sus habilidades, cosa que la chica carecía, pues si bien había tenido la experiencia con los entrenamientos de Yuki, ahora estaba completamente sola e insegura por su posible desempeño en las futuras misiones que le podrán encomendar, sin embargo, trato de que no se demostrará, al menos no por ahora.

La chica se quedó unos minutos sentada en su pupitre esperando alguna indicación, no obstante, Yaga ya se había retirado del salón, una vez le dijo a shoko que fuera hablar con otro profesor. Los chicos se retiraron sin despedirse de nadie, concentrados en su disputa de quién iba ser más rápido en derrotar a la maldición. Por lo que Agatha se quedo completamente sola, como si todos se hubieran olvidado de su existencia.

— Supongo que tendré que adaptarme a esta nueva rutina.- Agatha dice para sí misma y se levanta de su asiento para comenzar a observar el salón. Era casi igual a los de su antigua escuela pero con un toque más oriental, típico de los mangas que leía de vez en cuando.

Agatha no sabía qué hacer, se había preparado mentalmente para todo tipo de situaciones como ir directamente a un entrenamiento o ir a su primera misión pero nada de eso había ocurrido. Por lo que, con las ganas y el entusiasmo que le quedaban, comenzó a explorar la escuela, encontrándose con algunas personas con uniformes, algunos con trajes negros y otros como el de ella, que la saludaban de paso pero ninguna se detenía a hablar con ella, cosa que no le importaba, quizas estaba tan acostumbrada a estar sola que eso era lo de menos, aunque si le daba cierta tristeza al recordar la compañia de su unica amiga.

— Ahora estaríamos comentando sobre el nuevo tomo de nuestro manga favorito... .- Murmura la chica invadida por la nostalgia, recordando a su amiga.

— ¡Takano! .- La chica escucha a sus espaldas que una voz femenina la llama, por lo que se gira de inmediato, tal vez imaginando que su amiga la estuviera llamando, sin embargo, tan solo se encuentra a su nueva compañera Shoko, la cual se acerca corriendo.- ¿Dónde te habías metido? te estaba buscando...

— Bueno, como todos tenían que hacer, me puse a recorrer la escuela, al menos para hacer algo.- Agatha se cruza de brazos.

— Una disculpa, el profesor Yaga no deja de molestar, como no suelo ir a misiones, siempre quiere que vaya a ayudar a los profesores, pero logré escaparme esta vez .- La risa traviesa de Shoko causó que Agatha sonriera automáticamente y dejará de estar un tanto malhumorada.

Shoko pasó su mano alrededor del brazo de la chica y comenzó a caminar junto a ella.

— Creo que Yaga esta vez no te dejo alguna tarea por hacer por lo que te paso hace un rato, ¿Te suele pasar a menudo? .- Shoko la mira de reojo.

— Sí, desde hace meses, supongo que me empezo a doler por los nervios del primer día, no lo sé.- Agatha prefirió omitir gran parte de la información.

— Mmh... sufres de jaqueca, que mal .- Se toma la barbilla con su otra mano .- Aunque, cuando toque tu cabeza percibí una extraña energía maldita, no quiero suponer nada pero no es algo que suelo percibir a menudo, ¿Te acuerdas cuando te dolió la primera vez? .- Shoko dejó de caminar sosteniendo aún a la chica.

— La primera vez que me pasó fue en la enfermería luego de haber luchado con una maldición, Alice estaba conmigo.- Agatha comenzó a recordar aquella vez, apareciendo múltiples imágenes borrosas, preguntándose a qué se refería con esa extraña energía maldita.

"𝐀𝐧𝐝𝐫𝐨𝐦𝐞𝐝𝐚" | 𝐉𝐮𝐣𝐮𝐭𝐬𝐮 𝐊𝐚𝐢𝐬𝐞𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora