Oh, jodido infierno, a Sergio le encanta el sexo.
Pero cree que algo que le gusta igual, e incluso más, es el momento en que Max y él se abrazan después del sexo, cuando éste comienza a halagarlo, a acariciarlo delicadamente con la punta de los dedos, cuando están somnolientos y los envuelve una tranquila felicidad.
Han estado teniendo relaciones durante casi dos meses, pasaron incluso el celo de Sergio juntos (Max se enamoro, se maravillo tanto ante la necesidad latente en Sergio).
Ellos incluso habían tenido la mala suerte de ser atrapados por Yuki, que sólo había dado media vuelta y así como había llegado, se había ido. A Max le había dado risa y Sergio quería que la tierra se lo tragara ¡Que vergüenza! ¡Era su hijo, por el amor a todo! Pero todos lo habían superado al final de todo, Yuki a veces todavía no podía verlo a la cara sin sonrojarse, pero lo superaban.
Otra buena noticia era que Yuki por fin comenzó a hablarle a Max, le había llevado casi los dos meses, pero comenzaba a hacerle un par de preguntas de vez en cuando, ya fuera de la universidad, el trabajo o su familia, obviamente nada era como antes, pero Sergio tenia la esperanza de pronto fuera de esa manera.
—Mi mamá quiere que vayas a comer a la casa— murmuró Max rompiendo el cómodo silencio.
Sergio tarareo, reacomodandose de forma que ahora estaba cruzando las manos sobre el pecho desnudo del alfa y su cabeza sobre el dorso de éstas.
—¿Celebramos algo?
—Tal vez lo bonito que eres— le dijo Max coqueto, acariciando su barbilla con el pulgar.
—Basta— dijo riendo el omega y cubriéndose las sonrojadas mejillas.
Max le pellizco una mejilla.
—Tal vez lo precioso, adorable, magnifico, fuerte, valiente y sexy que eres, eso sobre todo, lo sexy que eres— esta vez lo que le pellizco fue una nalga— o tal vez lo que debemos celebrar es lo suertudo que soy por tenerte.
—Oh cállate, adulador— dijo dejando caer la cara contra el pecho de Max —. ¿Cuándo? Para ir haciendo espacio, últimamente me estoy ahogando en trabajo— gimoteo.
Max acarició su cabello.
—El próximo sábado, también quiere que llevemos a Yuki. —Entonces es una cosa buena que ya te hable— murmuro.
Sergio comenzó a dormitar una vez más con Max jugando con su cabello y con su cabeza escuchando los acompasados latidos del corazón del alfa.
—Tengo hambre— medio escucho un rato después, pero estando prácticamente dormido lo ignoró.
—Sirviente— escucho a través del sueño, siendo agitado por el hombro—, sirviente— volvió a escuchar, ésta vez comenzando a abrir los ojos y encontrándose con la mirada de Max —. Sirviente, tengo hambre, dame de comer— le dijo descaradamente.
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Dicha | Chestappen | Adaptación
FanfictionCheco es un omega soltero de treinta y tres años con un hijo, pero muy feliz. -Indicaciones: • Adaptación • Chestappen | Max Top x Sergio Bottom Advertencia ⚠️ En está historia contiene abuso sexual no explicito hacia uno de los protagonistas. Si e...