Harua On Board [Nicholas x Ej] Nichojoo

Cincuenta y cuatro

Un Harua feliz se carcajeaba cuando su mami lo acostó en la cama para secarlo. Recién le había dado un bañito. Y al bebé le daba cosquillita cuando su mamá le ponía cremita y talquito.

── Mum-Mamá ──murmuró la bolita de nieve sujetando la mano de Juju, con las dos suyas gorditas.

── ¿Qué pasó, bebé? ──le preguntó Ej con una sonrisa.── ¿Te hace cosquillas? ──

El pequeño de un añito balbuceó y dejó la mano de su mami, para que este le colocara el pañal y su ropita.

Euijoo vistió a su tesorito con delicadeza y le dio un besito en la cabecita, pidiéndole que no se moviera. Ya que iría a por sus otras cositas, para peinarlo.

Cuando estuvo de vuelta agarró un peine pequeño y lo pasó por el bonito cabello negro que poseía su primogénito.

── Oh, tu pelito ha crecido mucho, cucú ──dijo notando cómo este cubría los ojitos de su gordito.── ¿Debería cortarlo un poquito? ──

Haruita frunció su ceñito y cubrió su cabecita con sus tiernas manitas.

── Mamá, ño~ ──

Juju se carcajeó con dulzura.

── Está bien, lo dejaremos así. Pero tendremos que hacer algo para quitarlo de tu carita. Los niñitos no pueden andar por ahí con los ojitos tapados ──

El bebé quitó sus manitas y dejó que su mami le hiciera una adorable coletita en medio de su cabecita, dejando unos adorables flequillos a cada lado.

Se veía tan abrazable que el coreano no tardó en tomarle fotos, y luego cargarlo para llevarle donde el espejo.

Harua se miró y cubrió su boquita para luego reír feliz.

── ¿Te gusta, bebé? ──

── Mamá ──

── Sí~, te ves adorable ──

Le dio un besito en la frentesita, y Haru se lo devolvió en la mejilla.

── Te quiero mucho, mi amor ──le habló con voz adorable.

── Te tero muso, mamá ──devolvió y antes de que Juju pudiese colapsar de amor, el bebé chilló.── ¡Papá! ──

Había sentido el olor y la voz de su papi, cuando este regresó a la casa.

Euijoo caminó hacia la sala para encontrarlo y este venía con un pequeñito escondido tras sus piernas.

── Volví, cucú, y mira a quién te traje ──

Un adorable Yuma salió de su escondite y festejó. Harua chilló emocionado y pataleó para que su mami lo bajara.

── Mamá, suete ──le pidió a Euijoo.── Uma ──

── Que lo sueltes Juju, quiere ir con su alfita ──tradujo el taiwanes viendo al bebé moverse inquieto.

El omega mayor se carcajeó y finalmente dejó al bebito en los brazos del alfita de seis añitos.

El pequeño Murata lo apachurró en sus brazos. Escuchando la risita de contentura del copito de nieve.

── ¿Y esta agradable sorpresa? ──preguntó Euijoo viendo como Yuma tomaba asiento con Harua en sus piernitas y el bebé parecía muy cómodo.

── Fuma-hyung lo llevó hoy a la empresa porque Harin estaría ocupada. Y bueno, cuando ya estaba por irme un pequeño tiburoncito se me acercó haciendo pucheros para venir a ver a nuestro cucú ──comentó con ternura.