Once

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Finalmente el día había llegado.

Un inquieto Yuma no podía dejar de pensar en cómo sería la carita de su futuro omega.

Aunque se había visto a sí mismo y a otros bebés cuando recién nacidos y la verdad no le gustó. Según él a unos días de haber nacido se veían raros.

Pero su papá ya le había mencionado tantas veces que Harua estaba tan lindo que no podía dejar de mover sus manitas ansioso, mientras su papá conducía hacia la casa de los Wang.

── Yuma, cariño, ¿tienes el regalo para el bebé contigo? ──preguntó la omega de Fuma.

── Sí, mami, no te preocupes ──

Respondió para luego volver a posar la vista en la carretera. Ya faltaba muy poco.





[⺌하루아! ヾ]




Cuando Nicholas abrió la puerta y se encontró a la familia Murata en la entrada sonrió, aunque le gruñó un poquito al alfita de su hijo. Este no se dejó intimidar y le devolvió el gruñidito.

── Te dejaré salir con mi hijo sólo si eres digno ──advirtió.

El cachorro hizo una pose de hombre serio.

── Claro que lo soy, hyung ──

Yuma a pesar de tener sólo 5 añitos, ya pensaba en grande.

── Pasen ──indicó haciéndose a un lado.── Harin es bueno verte de nuevo, sigues preciosa ──elogió a su amiga.

── Lo mismo digo, Nich. Felicitaciones... ¿Cómo van esas tareas de padre primerizo? ──

── Nada es tan terrible ──

Fuma sonrió ante la interacción de su omega y su mejor amigo, y luego miró a su hijito, este daba pequeños saltitos en el lugar, siendo consumido por la ansiedad y el desespero.

── ¿Y Haru? ──

── Euijoo lo acabe de bañar, se ha quedado dormido ──respondió el taiwanes.

Eso hizo que el pequeño alfita se colocase triste. El quería ver a su destinado.

Sin embargo en ese instante apareció Ej con el bultito adorable en brazos. El pequeñín dormido y suspirando.

── Oww, Yuma, ¿viniste a ver a nuestro cachorrito? ──

El pequeño Murata asintió, mirando enternecido a la bolita de nieve y cabellos negros.

── Está dormido, pero puedes acercarte ──habló Byun, sentándose para que el pequeño viniese hacia ellos.

Y eso hizo. Muriéndose de amor cuando el pequeñito omega al sentirlo abrió sus ojitos curioso y trató de olfatearlo.

Yuma al ser un alfa joven no tenía olor, pero la conexión con el bebito hizo que este despertase curioseando.

── Es el bebé más hermoso que he visto ──soltó enamorado.

El pequeñito tímido se escondió en el pecho de su mami, y eso entristeció al pequeño alfa.

── Creo que no le agrado ──

Nicholas le sacó la lengua, pero luego negó.

── Sólo está tímido, él puede sentir lo mismo que tú sientes aunque sólo sea un bebé... Sabe que su lugar está contigo, y eso lo cohíbe un poco, es una sensación nueva para su joven corazoncito ──explicó.

── Te ha reconocido como su alfita, Yuma ──felicitó Euijoo, al ver a su cachorrito salir de su escondite para agarrar sin timidez la manito con que el pequeño de 5 añitos le estaba acariciando.

El bebé sonrió y ronroneó a gusto.

Harin empezó a llorar de la emoción, mientras su alfa mencionaba algo de que su hijo era su orgullo.

── ¿Lo puedo cargar? ──preguntó emocionado el menor.

── Claro, siéntate aquí ──señaló a un lado suyo en el sofá.

Cuando el pequeño lo hizo, dejó al cachorrito en sus brazos.

Y Yuma no pudo evitar mirar sus ojitos por un largo rato, mientras el chiquitito Harua le sostenía la mirada.

── Aww, creo que definitivamente están hechos el uno para el otro ──Fuma alegó.

── Hola, Haru... Yo seré tu alfa cuando seamos grandes... Te voy a cuidar y querer mucho ──el pequeño alfa le habló a su destinado, dejando que este jugase con sus dedos.

Luego le dio un besito en un cachetito y el cachorro ronroneó y se removió tratando de acercarse más a Yuma.

── Le gusta estar contigo ──Ej felicitó.

Yuma le regaló una aniñada sonrisa mientras mecía un poquito a su futuro omega.

── Oh... Se quedó dormido encima tuyo... ──señaló Nicho.── Se nota que está a gusto ──los demás asintieron.── Está bien, Yuma, te dejaré ser el alfa de mi hijo ──aceptó.

El menor rió tiernamente, arrullando al cachorrito. Mientras sus padres reían.

── Bro... Creí que nunca te escucharía decir eso ──soltó Fuma.

Euijoo asintió estando de acuerdo.

── Harin-ssi... Ya que tú eres madre mucho antes que yo, ¿me podrías dar algunos consejos? ──

La bonita mujer asintió y encantada se fue a acompañar al omega más joven, mientras los alfas se quedaban conversando y los cachorros continuaban estando a gusto tan cerquita.

Harua dormidito sosteniendo con su manita un dedito de Yuma y este muriéndose de amor por dentro. Ese bebé de piel pálida, bonitas facciones y cabello negro sería un hermoso chico cuando creciera... Y ese sería su omega... Su corazoncito de niño alfa no podía estar más descontrolado de lo feliz que se sentía...







































UwU qué bomnitos son. Ah, chiquis, les quería decir que en el siguiente cap voy a hacer un time skip, porque no me puedo aguantar y ya quiero poner a Haruita haciendo más cosas :3

Mimos y besitos<3

























Harua On Board [Nicholas x Ej] NichojooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora