𝐓𝐇𝐀 𝐋𝐀𝐒𝐓 𝐃𝐑𝐀𝐆𝐎𝐍 ▬▬▬▬ 𝐇𝐎𝐓𝐃

xiv.

SENTÍA QUE ERA DE NUEVO ESE NIÑO DE QUINCE AÑOS QUE FUE HERIDO EN LA ESPALDA debido a su entrenamiento así que simplemente veía su herida en el espejo sin prestar mucha atención a su al rededor.

La puerta fue abierta dejando ver a Sir Criston Cole quien hizo una reverencia para luego dejar ver a la reina verde quien al observar al joven con su herida dejó soltar algunas lágrimas.

- Baelon - se acerca el arrepentida tomándolo de las manos - Lo siento, lo siento tanto -

El solo la observa sin decir nada, no sabía que decir realmente ¿Esta bien? No lo sabía.

- Yo... Demostré una actitud fuera de mi posición, o de cualquier posición y quiero decirte que realmente lo siento, todo lo que estaba sucediendo me altero -

- Lo entiendo - dice al fin - Pero por el momento creo que seria más apropiado si mantenemos algo de distancia -

- ¿Te iras? - dice asustada

- Solo por algunas lunas iré al Valle, planeo llevarme a Halaena si es que me lo permites - informa alejándose para acomodar algunas de sus cosas

Ella lo mira fijamente para luego dar algunos pasos cerca suyo, lo tomo por los hombros para luego besar con desesperación sus labios, estaba desesperada, ella deseaba estar al lado de Baelon y después de lo que hizo dudaba mucho de que fueran igual que antes así que actuó de nuevo por impulso besando a la fuerza al joven.

- Lo siento - se disculpa entre lágrimas al separarse

Baelon se sentía sorprendió, no sabía que hacer, él había visto a Alicent como una gran amiga, incluso cuando era más pequeño como una madre, pero jamás como otra cosa ya que era la esposa de su padre, la reina y era mayor que él. Aparto su mirada de ella sin sabes que hacer o decir.

- Baelon mirame - suplica la mujer - Di algo... ¡Baelon! -

El la observa a los ojos.

- Retírese de mis aposentos, majestad - dice alejándose de ella

La mujer se alejo del lugar haciendo que por fin el príncipe se derrumbe confundido, todo eso lo estaba afectando debido a la ausencia de su hermana, los recuerdos de su madre, los rumores sobre la legitimidad de sus sobrinos, la pérdida del ojo de Aemond y finalmente Alicent.

Y por fin dejó soltar aquellas lágrimas que tanto lo habían atormentado, se sentía de nuevo como un niño que buscaba su razón para vivir, buscar algo o alguien en esa soledad y cuando menos lo espero sintió como alguien lo abrazaba.

- Todo estará bien Bae - susurra Halaena acariciando su cabello - Lo prometo -

Dejó soltar más lagrimas, Halaena seguía ahí a su lado sin soltarlo o decir algo más, simplemente le mostró su apoyo.

- Pediré permiso pata que vayas conmigo al Valle - dice ya calmado - Si es que quieres -

- Me gustaría, gracias - sonríe

Él copia su acción para luego besar su frente.

- Gracias Hela -

- No me agradezcas, haría lo que sea por ti -

- Yo también haré lo que sea por ti Hela, todo lo que tu me pidas -

- Lo sé -

[ 🌊🍂🔥 ]

RHAENYRA OBSERVA COMO EL BARCO SE ALEJA DEL LUGAR Y COMO DOS DE LOS CUATRO dragones se separan hacia otra dirección, su hermano Baelon junto con Halaena irán al Valle quedándose ahí por algunas lunas debido a toda la situación supuso que su hermano quisiera alejarse y que mejor lugar que donde se crío durante tantos años.

Lo que le sorprendió fue la facilidad en que la reina acepto que su hija se fuera, hablando de la niña, ella lucia muy feliz en ir al Nido de Anguilas donde se dice que Lady Jayne Arryn los espera con un gran banquete.

- Mi querido sobrino - dice la mujer corriendo hacia el joven

- Tía - saludo con un abrazo

- ¿Y quien es esta bella niña? -

- Tía Jayne te presento formalmente a la Princesa Halaena Targaryen, mi prometida -

- Es un placer conocerla Lady Arryn-

- El placer es todo mio dulce niña, eres más bella en persona - alaga con su sonrisa maternal - Entren, ordene que hicieran pato asado y pastel de limón para la cena apuesto que les encantara -

Halaena nunca antes había salido sin su madre y hermanos así que se sentía libre estando ahí en el Valle donde podía ir a volar con dreamfyre cuando quisiera, podía portar los vestidos rosas y azules que tanto le gustaban, leer cuantos libros quisiera y hablar sobre sus insectos con total seguridad porque tanto los de la casa Arryn como Baelon le parecía dulce y tierno de su parte ya que su prometido también tuvo esa faceta.

- Los colores Arryn te quedan hermosos mi niña - alaga Lady Jayne

La princesa sonríe alegremente dando vueltas admirando el vestido que la mujer mandó a hacerle, uno muy bello lleno de color azul, celeste, blanco y perlas.

- Muy bella - opina Baelon viéndola

Halaena ríe, sus sueños no mentían cuando decían que sería feliz al lado de Baelon, él joven era exactamente lo que siempre deseos, porque al final él era lo que siempre quiso, Baelon es lo que siempre anhelo.

- Cuando sea tu boda estoy segura que portarás el vestido más hermoso que haya existido en los siete reinos, serás la novia más bella -

Lady Jayne Arryn no tiene hijos así que tener a Baelon y a Halaena a su lado era como tener hijos al fin, un niño y una niña preciosos así que no dudaba en llenarlos de afecto de cualquier manera posible.

- Gracias Tía Jayne -

- No me agradezcas por decir la verdad mi niña -

Ambas ríen viéndose al espejo ¿Acaso existía personas más feliz que Halaena Targaryen? No se sabe, pero estaba claro que la felicidad de la princesa era muy evidente por eso mismo estaba feliz Baelon al saber que su futuro esposa estaba cómoda en uno de sus lugares preferidos, incluso llegó a pensar en quedarse ahí, pero ella debía regresar con su madre, padre y hermanos además debía cuidar a sus hermanos menores y sobretodo a su padre ya que desde los últimos años su salud estaba deteriorada, seria muy injusto alejarse después de tan poco tiempo.