BABI
Una vez, cuando tenía al rededor de 13 años, recuerdo que iba con mi hermano en su coche. Y tuvimos la conversación más interesante del mundo a mi parecer en aquel momento. Hablamos de una realidad alternativa, una en la que nuestras decisiones eran otras, en la que los caminos se invertían o simplemente se volvían una línea recta. Llegamos a la conclusión de que nosotros nunca encontraríamos mejor aquella realidad, porque en esta que vivíamos estamos demasiado bien y cómodos justificándonos y sintiéndonos víctimas de factores externos. Y eso quizás no lo aprobé del todo en ese entonces, pero hoy comprendo que todo fue completamente acertado.
-Preciosaaaaaa- me grita mi madre desde la puerta entreabierta de la habitación.
-¿Qué quieres? - no aparto la vista del móvil hasta que carraspea para que le haga caso.
Su cabellera rubia pálida se encuentra reprimida en un alto y apretado moño y un pañuelo de tonos otoño hace resaltar su piel pálida. Mi madre es muy bonita, es de esas mujeres con porte digno de la realeza. Y desprende un aura que puede intimidar en primera instancia, pero que luego te invita a entrar en confianza.
-Al final no me dijiste que hicistes ayer al salir de tu clase. - se sienta sobre la mesa de madera apartando el par de cajas que había sobre ella.
Me incorporo antes de comenzar a contarle mi tarde.
-Es muy bueno querida, que hayas hecho amigos.
-No son mis amigos... Aún
Una ceja rubia se levanta.
-Eso deberías dejárselo claro al pelirrojo que te espera afuera.
Me levanto de un brinco de la cama.
-¿Ha estado esperando afuera todo este tiempo? - ella asiente fingiendo culpa-¿Lo has dejado solo?
-Bueno, tampoco es para tanto, se ofreció a montar el horno.
-Lara!
Corro fuera de la habitación y en la cocina me encuentro a Julián mirando el horno de mamá con cara rara.
-Julián - se me escapa algo que va entre un suspiro y un chillido avergonzado a la par de exasperado.
-Babi. Hola. Ven a ver - él por el contrario se ve sumamente feliz - No estoy seguro de que esto esté bien. Creo que faltan piezas.
-Oh, no chico, tranquilo, eso no sabe nada - dice mi madre totalmente relajada señalando las instrucciones - ¿Puedes creer que la primera vez que lo arme sobraron piezas.?
El pelirrojo me mira entre divertido y preocupado.
Ahora soy yo quien ríe. Muchas veces Lara justifica los asuntos menos significativos de su vida como errores de algo mayor y ella se vuelve víctima de la situación.
-Bueno chicos los dejo. Tengo trabajo. - dice ella y se marcha a su estudio tarareando algo - si vas a salir me dices.
Un silencio un tanto incómodo se instala durante unos segundos en los cuales noto que mi cabello da asco.
-Bueno, yo venía a invitarte a ir conmigo y los chicos a un festival que hacen en un pueblo cercano - dice el chico metiendo sus manos en los bolsillos y mirándome con la cabeza ladeada, nuevamente con esa mirada curiosa que me comienza a poner un tanto nerviosa. - si es claro que no te espantamos .
Me da gracia eso porque la tarde de ayer fue de las cosas más increíbles que me ha pasado en bastante tiempo, durante el tiempo que pasé con ellos sentí que realmente podría encajar en algún lugar .Despertaron mi curiosidad y mi último pensamiento antes de dormir a diferencia de cada noche del último año no fue la reprimenda que recibiría por parte de Scarlett ,mi psicóloga , por restarle importancia a cada cosa que pase en mi semana sino las ganas de que me felicitara porque esta vez realmente estoy motivada con algo que no esta en mi lista de cosas que vivir para tener una vida de libro romántico.
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Serendipia
Teen FictionEste es el cuento de la chica que quería una historia de amor y la que se autodenominaba reparadora de escencias. ...Los amores guiados por demonios rosas nunca terminan bien...