Cennet
Al otro día me desperté un poco más temprano de lo normal, ya no teníamos empleados y eso me daba más libertad para moverme en mi casa. Krin tiene su pareja y bueno están viviendo juntos, ella está trabajando para el en la empresa como diseñadora de gráficos.Su madre está viviendo en su casita y Krin la ayuda siempre así que las dos se fueron.
— Buenos días mi amor— escuché la voz de Marcus— buenos días— le dije, besó mis labios y subió a ver al nene.
Escuché dos disparos, justamente cuando pensé que habia paz en mi casa. Subí corriendo pensando en mi bebé.
Abrí la puerta y ví la escena mas horrible del mundo, una vez más Marcus está sangrando en el suelo y mi hijo está manchado de su sangre.
— Amor— dije y toque su mejilla, llamé al 911 y a las chicas para no estar sola— Cen, él está bien, te toca a ti cuidarlo— dijo y cerró los ojos.
No, no, no.
La ambulancia llegó tiempo después, los paramédicos me dijeron que está en un grave peligro.
No sabía que hacer, tengo un niño recién nacido y mi esposo en el hospital, sería absurdo dejar a mi bebé con alguien pero Marcus.
— Vé— dijo Gelma— déjanos a este bebé— me dice— pero...— dije— oye, ve con tu marido— vuelve a decir y agarro el auto para irme al hospital.
— Buenas, me puede decir dónde está Marcus Lasserre?— le pregunto a la recepcionista— si claro, está en urgencias— me dice y me dirijo al lugar.
Allí estaba Marco.
— Como está?— le pregunto— quisiera decirte que bien— me dice él y me siento a su lado— quien fue?— le pregunto.
— Tranquila, ya me hize cargo de eso Cennet, no te puedes manchar las manos ahora, tienes un bebé que cuidar— me dice él.
Dos horas más tarde que, para mis ojos fueron mil años salió el doctor.
— Como está?— le pregunto— está en coma, no creo que vuelva a abrir los ojos— dijo el hombre canoso que tenía ante mis ojos.
Disgustada regrese a la casa, necesito oler a mi bebé.
— Como está?— le pregunto a Gelma por el niño— dormido como todo un ángel— habla ella y me tiro a llorar en el sofá— tan mal está?— me pregunta.
— En coma, no creen que abra los ojos más nunca— les dije hipando debido al llanto. Las chicas me abrazan y me susurran palabras alentadoras para poder seguir adelante.
1 año después
Ah pasado un año desde que Marcus está en coma, mi bebé cumple su primer añito en tres días. El bebé es lo más hermoso que eh visto.Me equivoqué cuando dije que era igual a mi, no se porque ahora decidió empezar a parecerse al padre.
— Mi bebé hermoso— dije al verlo chupar el caramelo que Marco le trajo hace tres días. El me vio y sacudió su caramelito.
Marcus está igual que hace un año, ni para delante ni para detrás. Yo solo lo quiero aquí con nosotros.
— Pa-pà— escuché la vocecita de mi niño y lo ví— amor— dije y sonó mi teléfono— diga— hablé como pude ya que Kaiser me estaba tirando del pelo.
— Oye Kai espera— le dije al niño y volví a la llamada— dígame— volví a decir.
— Su esposo...— dijo e hizo una pausa— que pasa con él?— pregunté— está pidiendo verla a usted y su hijo— me dice y sonrió.
— El señor Lasserre está despierto— me dice y corté la llamada. Rápido arregle a mi bebé y salimos para el hospital.
Allí lo ví despierto mirando al techo.
— Oh dios!— exclamé con una mano en mi boca mientras con la otra sujetaba al nene— papá!!!— gritó el niño dando palmadas.
Los dos sonreímos, el porque la primera palabra fue papá y yo...y yo porque el seguía con nosotros.
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En la Mafia el amor, en el Amor la infancia
RastgeleEran 99 problemas y una solución, esa solución en cuestión de minutos se volvió otro problema. En ese momento solo pasó por mi cabeza huir...solo tenía 18 años en aquel entonces, ahora tengo 23 y no me arrepiento de nada.