Cuando dos almas se encuentran no hay poder humano que las destruya.
Axtrik es uno de los cantantes más famosos de su país, tiene varios títulos, una prometida hermosa y una carrera exitosa.
Aunque todo se torna rosa, el caos al recibir la noticia m...
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Ilain revisaba las cuentas de sus últimas ventas, analizó la gráfica que mostraba la pantalla del computador cuando se dio cuenta de la hora que era.
Momento de verse con Axtrik; sin embargo, él aún no llegaba por lo que decidió seguir en el trabajo hasta que su teléfono personal sonó.
—Dígame
—Señor, el cantante Axtrik está aquí, ¿quiere que lo pase a su oficina?
—Sí, por favor
—De acuerdo
Guardó los documentos sobre su mesa, cambiando el icono del monitor de la pantalla regresando al inicio, la figura de Axtrik se asomó desde lo alto.
Levantó la mirada observando al joven con interés.
—Buenas tardes —comentó Axtrik
—Buenas tardes, siéntese por favor —insistió
Él hizo caso sentándose en la silla, levantando su pierna haciéndola a un lado, con el apoyador dejó recaer su hombro recostando su cabeza en su mano.
—Bien, que quiere
—¿Cuánta agresividad? —inquirió ofendido
—La misma que con la que me agredió a mí y a mi supervisora —contestó
Ilain cerró los ojos, acercó su silla al escritorio pegando sus manos en la mesa, observando a Axtrik con una cara sería.
—Lo que pasó en el restaurante soló fue un mal entendido, espero perdones mi comportamiento y podamos arreglar esto de la mejor manera —explicó el Ceo
—Yo también espero poder solucionar esto, pero entenderá que no me gusta que me hablen mal, tampoco que interrumpan mis ocupaciones. Para ser un hombre de negocios parece que la educación no es su fuente —expresó con una mirada determinante
En poco tiempo los dos hombres estaban batallando por saber quién tenía la razón en ese momento.
Ilaiin quería continuar con la discusión, pero recordar las palabras de su asistente le quitaron la idea de la cabeza.
Ese hombre sabía muy bien cómo eran las cosas. Por lo tanto, antes de que la conversación se pusiera tensa, con presión, con más rivalidades decidió ir al tema.
—Escuché señor...
—Dígame Axtrik, no importa
—Axtrik, las cosas aquí son simples. Quiero que sea el modelo de mi empresa —confesó
Una enorme carcajada salió de los labios de Axtrik, incrédulo por lo que le ofreció, se golpeó la pierna con exageración para terminar cubriendo su boca.
—Esto es interesante, ¿por qué me quiere a mí? —cuestionó
De los cajones de su escritorio sacó varias revistas donde la portada estaba pintada por el nombre de AXTRIK en todo el lugar, además del hermoso atractivo que tenía el joven.
