Entre golpes

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El auto se mantuvo en silencio de camino al Hotel, cada uno observaba la ventana sin mucho interés.

Sobre las piernas de Ilain estaba el IPad que solía usar como agenda de diseños.

En ella tenía lo último en moda, tendencias del siguiente año con las compañías con las que tenía asociación.

Además de tener una carpeta con futuros diseños que usaría Axtrik.

Desvió su mirada al cantante notando su reflejo perdido, sus ojos cerrados le dieron tranquilidad.

Encendió el IPad, buscó diseños pausados trazando líneas con el Apple pensil, tenía como inspiración viejos modelos, tan antiguos que las personas se olvidaron que existen.

La idea principal, era un príncipe oscuro, con pantalones holgados formales, el chaquetón era pegado al cuerpo marcando la cintura, la espalda con tela amallada delgada, botones dorados en la espalda.

El cuello tortuga con pliegues de la realeza hasta la clavícula, luego con escote en V que cierra hasta el ombligo con más decoraciones.

Reviso la parte trasera de nuevo, cambiando el diseño, levantó la mirada a la ventanilla del conductor deduciendo que aún faltaba camino por recorrer.

Por último, como accesorio en el rostro una máscara que le cubriría la mitad de la cara, similar a la del Fantasma de la opera con la bella diferencia que la suya sería dorada con pedrería y una que otro diamante.

Solo para que paguen más por él.

Entre trazo y trazo, modificaciones, un recorrido largo, Ilain terminó de hacer el diseño para el concierto de Axtrik en Estados Unidos.

—Carajo es hermoso —lo aprecio con orgullo

—¿Qué es hermoso? —inquirió Axtrik con los brazos cruzados dedicándole la mirada

—¿No estabas muerto? —devolvió la pregunta apagando el IPad

—No, reviví hace cinco minutos, ¿terminaste el diseño para el concierto en Estados Unidos?

Él asintió con la cabeza.

—Déjame velo —pidió relajando sus hombros, desatando sus brazos

—Después

—¿Por qué no puedo verlo ahora?

—Por qué mis diseños son exclusivos, y aunque tú debas úsalos, no permitiré que veas algo que aún le falta ese toque —habló con un tono sofisticado

«Habla similar a Hugo Lombardi, además es gay» pensó imaginando al personaje con su ropa

—Soy yo el que los va a usar, tengo derecho a verlos —expuso

Ilain rio con ironía.

—Tú solo déjame ver que le falta, después te mostraré. Ahora vuelve a hacerte el muerto, disfruto más tu compañía de esa manera

—Bien, seguimos teniendo cosas en común, nos odiamos desde hace años... y yo pensando que el heredero del cual presumían había madurado, pero sigue siendo todo un idiota —Axtrik volvió a ventana, a través de ella podría notar a Ilain con el ceño frunció

—Bueno, al menos yo no debo casarme para ocultar que soy un gay del closet —añadió

Él giro su rostro como enojo, tomó el cuello de Ilain acercando su rostro al suyo

—Escucha bien idiota, con cerebro de maní, escrúpulos marginados y homosexual de primera categoría. El haberme acostado contigo no me hace gay, fue el puto vino que compre para calmar tu arrogancia —Axtrik lo soltó empujándolo —si vuelves a mencionar algo sobre lo sucedido jugo que te partiré la madre

Mi jodido cantanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora