Rio de Janeiro

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—Hécate, ¿estás segura que esto es una buena idea? —inquirió dudando sobre sus actos

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—Hécate, ¿estás segura que esto es una buena idea? —inquirió dudando sobre sus actos

—Por supuesto, ¿qué te preocupa?

—No lo sé, tal vez el hecho de que tengo al puto de Ilain detrás de mí —contestó con enojo

Ella apenas pudo reír por sus palabras, al empezar la gira y haber firmado contrato tan pronto con Ilain como condición se le puso al Ceo de acompañante para que en países extranjeros se le tomarán las fotos, además de usar sus diseños durante los conciertos.

No le gustaba mucho la idea, pero debía fingir para poderlos soportar, su Jet privado se dirige a Brasil para empezar con todo.

En poco tiempo Rio de Janeiro lo estará recibiendo con los brazos abiertos, Hécate revisa las estadísticas de lo que sería un buen concierto para un artista de música Rock.

Mientras que el artista disfruta su novela.

Detrás de ellos Ilain con su asistente diseñan los nuevos modelos de la colección que están a punto de sacar.

El Ceo no deja de dibujar en su Tablet los nuevos modelos, aunque no es diseñador su principal justo es el dibujo, su creatividad lo ha llevado a expandir sus conocimientos.

Como modelo tiene a Axtrik luciendo un traje más modesto que diseñó para los hombres con gustos extraordinarios.

Mueve su pie con ritmo para finalizar el vestuario dejándolo a medias.

Llamando la atención de su compañero que observó con discreción lo que hacía mientras él veía una película.

—Parece que te ganó la ansiedad —mencionó

—Que detallista —contestó Ilain con enojo

Axtrik no era el único indignado con la decisión tomada por su superiora, Ilain estaba disgustado por lo que había decidió él mismo.

No debió tomar una decisión tan apresurada como esa, debió pensarla, analizarla y no ir detrás de un culo rocanrolero que lo estaba buscando.

—Deja de pensar, querías a Axtrik y tienes a Axtrik, ¿qué te preocupa? —inquirió

—Que el ojo de gato me mate —contestó volviendo a su trabajo

Levantó la mirada buscando a Axtrik, lo único que logró ver fue su cabello negro.

El dibujo estaba a medio completar, necesitaba ver a Axtrik para consumir esa parte que faltaba, busco en la galería de su celular un video del cantante para tenerlo en cuenta.

Cada movimiento y acercamiento le daba inspiración para continuar con su diseño, llevaban horas en ese avión y antes de poder llegar a Rio de Janeiro terminó su dibujo.

—¿Qué opinas del diseño? —preguntó pasando la Tablet

—Te quedó muy bien, ya veo porque tienes una carpeta en tu celular que tiene cómo nombre "Axtrik" —se burló

Mi jodido cantanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora