Capítulo 19: amor

15 1 0
                                    

Despertó un rato después viendo que ya era de mañana.

-Buenos días -dijo él y sus labios estaban tan cerca, tan cerca... Suni se tensó esperando el contacto, sufriendo por los labios de Yoongi, con ganas de ser besada, pero él se enderezó con un bajo -Hay que levantarse-. Suni no pudo reprimir del todo el gemido de decepción.

-Yoongi -exhaló, con la boca seca, Yoongi cerró sus bocas juntas.

Gimiendo, Suni le agarró el pelo y tiró de él más cerca, abriendo la boca, ansiosa, tan ansiosa. Dios. Los labios de Yoongi estaban calientes y ásperos, no creía que jamás lograría salir de esa cama, quería quedarse en esa cama para siempre.

-Hmmm.

Se quejó

-Tienes colegio, último día de la semana.

-No quiero ir.

-Hmmm es tentador...pero yo también debo ir a mi trabajo.

Ella lo observó con el pelo enmarañado, el de ella debía estar igual con la diferencia de que él se veía guapísimo así.

-Ok -dijo ella besándolo de vuelta lentamente para ver si lo convencía. Él sonrió.

-Ok, basta de esto -decidida a al fin salir de entre sus brazos, hizo un movimiento para levantarse, pero él la agarró y no la dejó ir, la tiró a la cama de nuevo y se subió sobre ella pero sin aplastarla.

-Espera, espera, calambre, calambre -gritó ella. Yoongi se apartó y le tomó el pie frotándolo mientras recordaba respirar. Estaba duro como una roca, solo por un beso de ella.

-¿Mejor?

-Auch, duele aún, ay -se quejó Suni, mientras él le doblaba los dedos hacia adelante y luego hacia atrás. Ella se acomodó cuando dejó de dolerle. Yoongi le sonrió, nunca pensó en todas las veces que se imaginó con ella, que quedaría así de desesperado y fuera de control. Por un momento había tenido la pequeña esperanza que una vez que durmieran juntos se la sacaría de su sistema. Ahora solo quería que los días pasaran pronto para que ella se acostumbrara a él y pudiera follarla lo suficientemente duro.

La gatita que estaba mucho más grande se subió a la cama y comenzó a maullar, quería agua.

-¿Necesitas un beso en la planta? -preguntó haciendo uso de todo su control mental.

-Sí -dijo ella con un puchero odiando haber roto el momento romántico, él le dio un beso suave en el pie y se levantó, tomó al gato en sus brazos para dejarlo salir, luego entró al baño encendiendo la ducha.

Salió un momento después con una toalla a la cintura, Suni aún no estaba decidida a pasearse por ahí desnuda frente a él, menos con tanta luz, pero disfruto poder apreciarlo mientras se vestía, ya que él no parecía tener ningún pudor. Yoongi tenía una espalda ancha y varonil, brazos muy fuertes y un torso duro y delgado, tonificado pero no extremadamente muscular. Perfecto.

Se apuró en entrar a la ducha también, para no tener que luchar con las ganas de pasarle la lengua por el abdomen. Encendió el agua teniendo que pasar sobre las ropas de él que estaban tiradas por todos lados. Chapoteo junto a la ducha del agua que había caído fuera y pensó con algo menos de excitación en el cuerpo que realmente odiaba vivir con él.

Yoongi se hundió en ella poco a poco apretándola contra la pared, pero luego de unos minutos la tomó en brazos y la llevó hasta el escritorio, la recostó encima y la tomó de las caderas para embestirla con un ritmo lento pero firme. Ella jadeó, el dolor era ahora muchísimo menor, casi imperceptible. Se desabrochó el vestido mientras él seguía entrando en su cuerpo. Yoongi la levantó y saliendo de ella la hizo ponerse boca abajo en el escritorio. Esta vez fue más brusco cuando volvió a embestirla.

Our SongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora