¿Qué pasaría si después de tantos años visualizando a alguien como tú rival esa mirada cambia y se transforma a una de amor?
Esto fue lo que le pasó a Neteyam, desde que era apenas un pequeño niño se mostró siempre responsable a sus deberes y muy un...
Esa misma noche, Neteyam se encontraba recostado en su lugar de descanso oyendo los ronquidos de algunos de los miembros de su familia, el hijo mayor de Jake Sully era el único que se encontraba completamente despierto a altas horas de la oscuridad.
Con su cuerpo mirando hacia el techo, ocupando uno de sus brazos como almohada, con una curvatura rara en sus labios y ojos brillantes fijos en la zona superior de su hogar recordando varios momentos vividos con Bakary. Últimamente habían convivido más por ende se habían vuelto más cercanos dando como resultados varias situaciones alegres, graciosas, raras e incomodas.
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Las imágenes de ella sonriendo mientras sus cabellos se movían debido al viento pasaban una y otra vez por su mente. Ella corriendo por delante de el mientras el la seguían divertidamente era otro recuerdo que tenía, se veía bonita al tener tanta bioluminosidad a su alrededor siendo ella su centro de atención. Ellos tratando de cazar juntos y presumir de vez en cuando sus habilidades, compartiendo carnes y frutas al lado de una fogata improvisada o cuando la acompañaba a toda su rutina nocturna oyéndola cantar, reír y luego dormir. Se veían tan en paz cuando descansaba, tan en calma y tranquila, le gustaba como sus mejillas se ponían levemente rozadas y liberaba suspiros durante su siesta.
Pero la imagen que más se repetía era la de hace unos minutos atrás, verla reír a carcajadas y ponerse más roja debajo de el mientras que sus manos tocaban las suyas pidiendo que se detuviera, pudo sentir su cuerpo con el tacto de sus dedos al tener ese jugueteo, pero no se dio cuenta de que estaba tocando su vientre hasta que cometió la acción sin pensar. Tenerla acorralada con sus rostros tan cercanos sintiendo un raro impulso lo hacían morderse los labios cada vez que repasaba eso en su cabeza.
¿Por qué hice eso en primer lugar?
Se cuestiono golpeando su cabeza con una de sus manos, hasta detener la acción y cubrir su cara por completo, bajo de su palma su labio inferior era comprimido por sus dientes mientras que una amplia sonrisa de formaba.
¿Por qué se sintió incomodo y bien a la vez? Me pregunto si Bakary habrá tenido la misma sensación, es decir, no me alejo ni se quejó. Mas bien se comportó tímidamente ¿Eso será malo? ¿La abre hecho sentir muy incómoda? ¿Sera que le de mucha importancia o yo le estoy dando mucha importancia?
Su mente daba vueltas, se preguntaba cosas y trataba de responderse a sí mismo, su mano hecha un puño chocaba despacio contra su cien mientras mantenía sus ojos cerrados.
Calma, Neteyam, calma. Mañana sabrás si lo que hiciste estuvo mal o no, aunque ahora tu mente lo encuentre genial, solo duerme y cuando despiertes lo sabrás ¿Cierto?
Y eso fue lo que paso, luego de unos cuantos minutos más dándole vueltas al mismo tema, el joven cayo por el cansancio y al despertar tenía aun esa sensación de sentir vergüenza y alegría a la vez. Por lo que, luego de desayunar rápidamente, salió de su carpa directo a la aldea para buscar respuestas.
