Instinto || Jasper Hale • Crepúsculo

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Salimos de clases y Jasper me acompaño a donde había dejado mi motocicleta todos estos días. Me decidí a sacar mi iPod ya que estábamos platicando sobre mis gustos musicales. Decidí mostrarle las canciones de mi playlist, así que le di un auricular y me puse el otro yo. Antes de poder darle play a alguna canción vi como un auto se dirigía a toda velocidad a donde estaba Bella.

-¡Bella! -grité como primer instinto. Intente correr a donde estaba, pero sabía que no era tan rápida como para llegar a tiempo desde donde me encontraba.

En un abrir y cerrar de ojos vi como Edward detuvo el auto con su mano y toda la carrocería se redujo por el impacto. Todos los presentes quedamos paralizados y pudimos ver como Edward y Bella salían ilesos de entre los coches.

-Bella por favor perdóname -suplicaba Tyler una vez que bajó del vehículo. 

-¿Te encuentras bien? -le pregunte llevándola junto con Edward al hospital más cercano. Tyler nos seguía ya que él había sufrido más daños que Bella- ¿Cuánto es 5 x 8? -le pregunte mientras pasábamos el umbral del hospital.

-40 -dijo confundida por lo que acababa de pasar.

A ambos los atendieron con gran rapidez, al ser un pueblo pequeño no había muchos accidentes graves. Me pidieron que me quedara en la sala de espera junto con Cullen, Charlie acababa de llegar y fue corriendo adonde estaba su hija y poco tiempo llego el doctor Cullen.

Nunca lo había visto en persona, pero sabía que todos decían que era extremadamente guapo, pero cuando me dirigió una sonrisa mientras entraba a la sala siguiente supe que "extremadamente guapo" se quedaba corto a comparación de lo que era, era sumamente atractivo, seductor, deslumbrante...

-Cuida tus pensamientos, es mi padre -parloteó Edward mirándome de reojo.

No respondí a su comentario. Me fui por la tangente y recordé que había dejado a Jasper en la escuela y que me había marchado sin decirle palabra alguna, me llené de vergüenza y arrepentimiento.

-Jasper se quedó cuidando tus cosas -dijo Edward de la nada. Había olvidado por completo mi mochila y todo lo que deje al ir por Bella- Le sorprendió mucho lo rápida que fuiste y lo rápido que reaccionaste.

-Lees la mente -verbalicé en cuanto dijo todo lo de Jasper.

En cuanto dije eso se paró de donde estábamos sentados y entró a donde se encontraba Bella, imité su acción, pero las enfermeras no me dejaron pasar y antes de que pidiera decir algo el doctor Cullen salió por la puerta.

-Perdón, pero por el momento no podrás ver a Isabella -me comentó el doctor Cullen- ,pero ella esta bien no sufrió ninguna contusión solo esta confundida, pero es algo normal. Jasper te esta esperando afuera.

Después de agradecerle salí apresuradamente de ahí y al salir vi a Jasper junto a mi motocicleta y con mi mochila colgando del hombro, tenía el casco presionado entre su brazo derecho y su torso.

Me despedí luego de disculparme con él por haberlo dejado solo. En pocos minutos llegue a mi casa. La tarde había sido sumamente ajetreada. 

• • •

Raramente el día de hoy hacía sol y como de costumbre los pocos días de sol los Cullen no asistían, como era de esperarse eso no paso desapercibido por Bella quien pregunto por ellos.

-Cada que hace buen tiempo los Cullen desaparecen -decía Jessica, mientras tomaba el sol. Nos encontrábamos en el patio como casi toda la escuela.

-Creo que quizás y Loona sabe algo, ha pasado mucho tiempo con Jasper estos días -dijo Mike mientras reía como tonto.

-La verdad es que también es un misterio para mi, quizá y están haciendo una carne asada o algo por el estilo -dije, mientras imitaba la acción de Jessica y dejaba que el suave sol acariciara mi piel.

-¡Hey chicos! -nos llamaron Zack y su grupo de amigos- ¿Quieren venir este sábado a La Push?

-Claro

-Por supuesto

-¡Me encantaría ir! -dije emocionada por la idea- ¿Qué dices Bella?

-¿Qué es La Push? -preguntó confundida.

-La Push, nena, La Push -repitió Mike.

-Es una playa cerca de aquí -le respondí cubriéndome del sol.

-La Push -volvió a repetir alguien, yo rodé los ojos divertida y las chicas rieron.

-Esta bien, voy a ir, pero deja de decir eso -respondió Bella y nos pusimos de acuerdo con la hora.

Como hoy era viernes nos pusimos de acuerdo con los preparativos.

Llegando a mi casa le avise a mis padres que iría a la playa con unos amigos. 

Me pasé la tarde pensando en que podría estar haciendo Jasper.

Jasper.

Para mi infortunio hoy era un día soleado y, a menos que, quisiéramos ser descubiertos por los humanos, nos quedábamos en casa o salíamos a pasear al bosque.

Emmet y Rosalie quisieron ir a dar una vuelta a los alrededores, en cambio Edward, Alice, Carlise, Esme y yo preferimos quedarnos en casa. Carlise y Esme estaban en la sala conversando, Edward se había encerrado en su habitación y yo junto con Alice estábamos en una de las tantas habitaciones de la casa.

- Veo que ya tienes mejor control al estar con Loona -habló sacando un libro de una repisa, yo desvié mi atención de mi lectura- me alegra que mi idea funcionara.

-Muchas gracias por tu ayuda -dije dirigiéndole una sonrisa.

Flash Back.

-Ten -dijo Alice extendiéndome un pequeño mechón de cabello. La mire escéptico- es de Loona, creo que si hueles su fragancia y te acostumbras a  ella será más fácil estar junto a ella.

Tome el mechón preguntándome como es que lo consiguió y lo acerque a mi nariz. El olor era tan intenso y adictivo, así era como olía Loona. Entre en un frenesí y me apoye de un árbol cercano, clavé mis mano ahí para evitar salir corriendo por Loona.

Alice me miraba preocupada porqué no estaba segura que funcionara. Durante todo el rato que estuve ahí me sentí seguro al saber que si intentaba ir por Loona, Alice me iba a detener como pudiera o iba a poner a Loona a salvo.

Fin.

Recuerdo que había pasado horas en ese árbol con Alice estando atenta a mi comportamiento. Me sentí extraño al oler el cabello de Loona de esa manera, pero la incomodidad y el reprimir mis instintos había valido la pena ya que ahora me resultaba más fácil estar junto a Loona sin querer comerla.

Cuando volví a mi habitación me di cuenta que me había quedado con el iPod de Loona y luego de varios minutos meditando decidí escuchar las canciones que tenía guardadas y decidí escribirle una lista con canciones de mi preferencia.