Estaba en shock al ver a Hentan así, estaba muy mal.
Otro médico entró.
‑ ¿Son los dos jóvenes del tren? ‑
‑ Si, ellos son ‑
‑ El chico tenía un torniquete improvisado, pero que aún así le sirvió mucho, la chica está más grave ‑
Hai y yo nos miramos, había sido Ellen.
‑ Ellen ‑ dijimos al unísono.
Ella se había arriesgado para ayudar a Hentan, es muy buena.
‑ Ella lo ayudó ‑ dijo Hai entre lágrimas.
‑ Ella puso su salud detrás para poder ayudar a Hentan ‑ dije con tristeza.
Me acerqué y abracé a Hai, ella estaba muy triste, y yo empecé a llorar, ver a tu amor de juventud así no es fácil.
Yo casi nunca lloraba, pero era muy difícil para mí ver a Hentan así.
También estaba muy agradecido con Ellen, aunque deseaba que ella también esté bien.
Entró otro médico a la sala.
‑ El chico ya está estable, pueden pasarlo a una habitación normal ‑
‑ ¿Y Ellen? ‑ dijo Hai preocupada.
‑ ¿La chica? ‑
‑ Si, ella ‑ dijo Hai separándose de mí.
‑ Ella está muy grave, creemos que pudo tener una conmoción cerebral‑
Ambos nos miramos extrañados, no sabíamos que era.
‑ Tuvo golpes en la cabeza, cuando despierte puede no saber dónde está, o quiénes son, pero lo irá recordando, solo que puede tardar días, semanas o incluso meses ‑
Hai rompió más en llanto.
Los cinco minutos ya habían pasado, por lo que nos fuimos. El padre de Hai estaba afuera, por lo que ella lo abrazó con fuerza.
‑ Ya llamé a tus padres Ryuga ‑ me dijo su padre
‑ Gracias señor ‑
Mis padres fueron a buscarme.
‑ Hijo, ¿qué pasó? ‑ preocupada me preguntó mi madre.
‑ Hentan ‑
‑ ¿Qué pasó con él? ‑
‑ Sufrió un accidente en el tren ‑ dije entre lágrimas mientras abrazaba a mi madre.
Ella acariciaba mi pelo tratando de calmarme.
‑ Está todo bien, tranquilo ‑
‑ ¿Puedo quedarme un rato más? A Hentan ya lo pasaron a una habitación normal, porque ya está estable ‑
‑ ¿Estás seguro? ‑ preguntó mi padre.
‑ Si, es como si mamá se enfermara, vos quisieras estar con ella todo el tiempo, es lo mismo, pero con Hen ‑ dije desesperado, necesitaba verlo y estar con él.
‑ Está bien, nos quedaremos en la sala de espera ‑ dijo mi padre.
‑ Si necesitas apoyo estamos acá ‑ me avisó mi madre.
‑ Gracias, en serio, gracias ‑
Fui a ver cómo estaba Hentan, necesitaba estar con él lo más posible.
En su habitación agarré su mano y lo miré, tenía muchas máquinas conectadas a su cuerpo.
Al mirarlo sentía que mi mundo se caía a pedazos, entre lágrimas le dije:
‑ Perdón amor, perdón por no protegerte ‑
ESTÁS LEYENDO
Amor de juventud 2
Teen FictionSegunda parte de Amor de juventud. Todo va bien para Ellen y Hailey, ya llevan un año de relación, todo va bien, ¿verdad?