Maravilloso

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Esperé que Mariela desista pronto, nunca le había interesado nada que tuviera que ver con Charly, pero eso no pasó.

El tiempo siguió pasando entre el trabajo, los abogados y la paternidad; a veces estaba tan cansado que a penas apoyaba la cabeza en la almohada caía rendido en sueños profundos sin recordar que día era.

Aquél día fue uno de esos. Desperté y Fran no estaba conmigo. era temprano, pero ninguno trabajaba ese día.
Me estiré para apagar la alarma y escuché el murmullo en el pasillo, Fran le decía a Charly que debía permanecer callado para sorprenderme.

Inmediatamente me tape y cerré los ojos fingiendo dormir para no arruinarles la sorpresa a mis chicos.

Escuché la puerta abrirse y los pasos lentos de los dos acercándose a la cama.
apoyaron algo en la mesa de noche y luego sentí el cuerpo de Charly subiendo junto a mí para abrazarme inundando mi nariz con su habitual perfume de coco.

-¡feliz cumple papi!-gritó encima mío aún con sus bracitos a mi alrededor

Ni siquiera recordaba que era mi cumpleaños y tardé algunos segundos en hacer los cálculos mentales, pero así era, ese día cumplía años.

Abrí los ojos y los vi a los dos junto a mí, habían preparado un desayuno sorpresa solo para mi (aunque Charly terminó comiendose las galletitas de chocolate que habían horneado).
junto al desayuno había un dibujo de Charly, éramos nosotros dos rodeados de dinosaurios.

Abracé a mi hijo y le agradecí, y mientras él encendía la televisión del cuarto para ver sus caricaturas, Fran me besó.

-feliz cumpleaños, bebé

-creo que justamente bebé no soy-le dije sonriendo antes de besar de nuevo esos labios que me encantaban

-sh, dejame mimarte, lo mereces

Él se sentó a mi lado, dispuesto a beber su café matutino, y sus palabras rebotaron en mi mente unos minutos.

"ser mimado" "merecer ser mimado" no me había dado cuenta el tiempo que había pasado desde la última vez que alguien me había mimado, y ni siquiera consideraba merecerlo, era un poco triste.

-sos maravilloso, Francisco

Los tres desayunamos hablando de la celebración de la noche. yo no había tenido tiempo en organizar nada, pero una cena en casa entre los tres estaría más que bien.

●●●

Por la noche, Francisco me pidió que los espere adentro mientras ellos dos preparaban algo en el patio.
yo quería olvidarme de todos los problemas y enfocarme en la fiesta, pero no podia, no dejaba de pensar en Mariela y la posiblidad de perder a Charly.

me llevó al patio dónde habían preparado mesas de excesiva comida, decorado con cosas que Charly había dibujado y empezamos mi cumpleaños, el mejor que tuve en mucho tiempo.

comimos y festejamos juntos, yo no necesitaba estar con nadie más que con ellos para pasarla bien.

Algunas horas después Charly se quedó dormido en el sofá asi que Fran y yo abrimos un vino y fuimos a la sala.

-gracias por este dia,fue perfecto-le dije y no mentía, me hizo bien festejar, lo necesitaba, necesitaba algo de paz en esos días.

Él sonrió y me besó.

-me hubiese gustado organizar algo mejor, pero estamos tan tensos, con todo esto...

dejé la copa y abracé su cintura

-sos maravilloso, tenia muchas ganas de estar a solas con vos-le dije besando su cuello

-es la segunda vez que decís que soy maravilloso, tene cuidado que me voy a enamorar de vos

lo miré. sentí un poco de miedo, porque yo ya lo estaba

-¿eso seria malo? porque yo...bueno, no quiero asustarte, pero creo que lo estoy-iba a ser directo con él,no teníamos edades para andarnos con rodeos

Él sonrió y besó mi frente

-estoy perdidamente enamorado de vos, Esteban

Nos besamos y una vez más mi mente olvidó los problemas, solo estaba ahi perdiendome en los besos de ese hombre que a esas alturas era más que maravilloso.
pero él me detuvo.

-¡dios! hice tantas cosas que me olvidé-dijo metiendo una mano en su campera-tu regalo

Me entregó un sobre que dentro contenía tres pasajes a Mar del plata.

-pero esto es para...

-el fin de semana, necesitas despejarte, vamos a ir los tres a la playa...

No lo dejé terminar, lo abracé y besé profundamente, no sabía si efectivamente iba a poder despejarme, pero estaba dispuesto a hacerlo por ellos.

Charly: 𝐞𝐬𝐭𝐞𝐛𝐚𝐧 𝐱 𝐟𝐫𝐚𝐧𝐜𝐢𝐬𝐜𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora