03

3.4K 170 16
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Asi pasaron meses, algunos dias Enzo iba a la casa de Julieta y boludeaban

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Asi pasaron meses, algunos dias Enzo iba a la casa de Julieta y boludeaban.

Pasaron meses, y meses...

Hasta que Julieta tuvo 14 años y todo dio un giro.

Julieta estuvo todo el día estresada y confundida por la culpa de un compañero, Mateo.

Estaba esperando a llegar a su casa para contarle su problema a Enzo.

Durante todo este tiempo el vinculo entre Enzo y Julieta tomo mucha mas confianza, pero solo eran amigos.

A Enzo eso no le molestaba, solo queria estar con ella.

Y el tema de la edad.... a Enzo no le importaba mucho, no ahora.

Ya estaba muy enganchado.

La menor abre la puerta de su casa y deja pasar a Enzo.

Los dos se sientan en el sillon, como de contumbre, Enzo agarra el control de la tele y empieza a buscar un canal entretenido.

La chica dudaba si contarle o no, pero siempre le contaba todo ¿Por que no le contaria esto?

- Eu Enzo, necesito ayuda. - dijo llamando la atencion del morocho, el cual la miro y pregunto

- Te ayudo con un calculo o algo? - pregunto sentandose a un lado de la chica

- No, no, necesito ayuda con un chico. - dijo calmando y alertando a la vez a Fernández

Enzo sabia que en algun momento esto pasaria.

- Contame. - pidio él

- Bueno es que, un compañero, Mateo, se empezo a juntar conmigo, esta todo el tiempo al lado mio, me habla de cualquier cosa todo el tiempo, y no lo soporto- dijo haciendo que a Enzo se le forme una sonrisa - pero eso no importa, lo que pasa es que hoy me dijo si el lunes le daba un beso y yo por los nervios le dije que si... - finalizo la chica esperando una respuesta del mayor.

- Y el problema? - pregunto como si no estuviese celoso.

- El problema es que yo no se dar un beso. - dijo la castaña con algo de vergüenza

INOCENCIA | Enzo Fernández Donde viven las historias. Descúbrelo ahora