Capítulo 1: ' New home'

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Yami

Yugi: Yami, ten cuidado, no quiero que te vuelvas a caer como la vez pasada.

Yami: ¡ Si, mamá!- me logré bajar y ayudé a acomodar las cosas en nuestra nueva casa, llegamos a otro reino, estoy acostumbrado a este tipo de cosas todo el tiempo, llegamos a un pueblo nuevo, el trabajo es fácil para nosotros y ayudamos a los vecinos, lo que no entiendo es porque nos vamos, nos quedamos por un tiempo, algunas veces más otras menos, pero siempre nos terminamos yendo a otro pueblo, siempre me he preguntado porqué, y siempre nos vamos en las noches, a veces me duermo porque no aguanto el sueño, pero cuando logro quedarme despierto, mi madre siempre se cuida de todo en el camino, como si alguien nos estuviera siguiendo.

Después terminé de acomodar y mientras mamá empezaba a trabajar en los cultivos, yo ayudaba haciendo jarrones, siempre me gustó y cuando era más pequeño tuve la oportunidad de aprender de una mujer que me enseñó mucho, y aunque nos fuimos de ahí, siempre aprendo nuevos diseños, además resulta que mucha gente los necesita, los que pueden pagar con oro lo hacen, pero honestamente prefiero los intercambios, en especial cuando son animales, es comida para mamá y para mí, no desprecio nada por nada.

Cuando me quise tomar un pequeño descanso para tomar agua, aproveché y alimenté el caballo de mamá, saqué un pergamino que tengo desde hace tiempo, siempre que veo un patrón o algo que me gusta, lo dibujo, tal vez mañana pueda salir a conocer y la imaginación me acompañe, uno nunca sabe, además me gusta pensar que cada lugar tiene su encanto, ya sean las personas, los diferentes puestos que hay... y cuando vi a tres personas en la puerta, me asusté y corrí, verdad que el trabajo sigue hasta el anochecer.

En la noche...

Me despedí de los clientes que terminé de atender hoy y cerré, al poco tiempo llegó mi mamá y lo abracé.

Yugi: Mira, logré traer algunas para tí- manzanas, me encantan.

Yami: Gracias mamá- cenamos y le conté como me fue hoy- fue increíble, llevamos un día y ya me ha ido bien, ¿cómo te fue a tí?

Yugi: Igual de bien, mi pequeño, la mujer que se encarga de manejar a los cultivadores me ayudó bastante, y al ver que supe manejar bien las cosechas, me dejaron traer fruta a casa, debe irnos bien para que podamos sobrevivir.

Yami: Si mamá, lo sé- nos ha ido bien porque sabemos mucho, mi mamá además del cultivo, sabe leer, y no es muy común ese don entre la gente del pueblo, así que me enseñó apenas tuve la oportunidad, y a veces se nos presentan mejores oportunidades, pero siempre pasamos desapercibidos, nos escondemos entre las personas, no sobresalimos, y así soy feliz la verdad- ¿mamá, podemos salir esta noche a conocer?

Yugi: De acuerdo, además debemos llevarnos bien con la gente si queremos quedarnos por un largo tiempo- asentí y apenas terminamos de comer, mi mamá me abrigó con una capa y salimos.

En todo momento me mantenía agarrado de su mano, a pesar de que sea de noche, hay muchas personas y no quiero perderme, y los vecinos nos saludaron, yo solo saludé y ya, siempre soy tímido para conocer gente, pero mamá sabe hablar adecuadamente, se llevaron bien de inmediato y nos ayudaron a conocer el pueblo, y nos encontramos con Joey y mi mejor amiga, y su hija Mai.

Joey: Viejo, pensé que no te vería, me asusté- viajamos juntos, literalmente al mismo tiempo, los dos trabajan en cultivo, pero al parecer no en el mismo lugar como en la mayoría de las veces- Mai, ¿no vas a saludar?

Mai: Hola Yug- y abrazó a mi mamá- ¡Yami!- y nos abrazamos, somos hijos de dos mejores amigos, así que la amistad entre nosotros dos es heredada, nos ayudamos cuando el otro tiene problemas, y cuando nos dejan salir a jugar, nos cuidamos entre los dos, porque sabemos que no toda la gente es buena.

En poco tiempo ya  nos llevábamos bien con los vecinos y Joey y Mai lograron ocupar la casa que queda al lado de la nuestra, así que estaremos juntos en la mayoría de los días, y todas las noches, mejor para Mai y para mí.

Mai: ¿Hoy trabajaste?, ¿Cómo te fue?

Yami: Bien, tuve muchos intercambios, pero mañana quiero conocer este lugar.

Mai: Yo también quiero conocer, el cultivo en donde estoy con mamá es interesante, el hombre a cargo me tiene mucha paciencia, pero con mamá me va mejor, así que evito despegarme de él- asentí, tiene razón, no debemos separarnos de ellos, miramos afuera y mamá estaba hablando con alguien- ¿tu crees que nos quedaremos por mucho tiempo?

Yami: Eso espero, la última vez duramos solo tres días.

Mai: A veces me pregunto porque pasa eso, mamá dice que es por necesidad, pero siempre nos va bien a donde quiera que vayamos, pienso que puede ser otra cosa... ¿tu qué crees?

Yami: No lo sé, pero a veces pienso lo mismo- la miré- además no sabemos donde nacimos, siempre he querido saber en qué pueblo nací, y porque sabemos leer, no todos saben leer excepto...

Mai: Los faraones, sacerdotes y gente que tiene poder, lo sé- volvimos a mirar a nuestras madres- algún día les preguntaremos, pero de forma delicada, no quisiera que mamá recordara cosas feas, si esa es la razón por la cuál nos vamos.

Yami: Yo tampoco quisiera eso, mi mamá ha dado mucho por mantenerme y enseñarme cosas, siempre pienso en devolverle cada favor- y algún día podré hacer más cosas, lo sé y lo siento en mi corazón, lograré grandes cosas y haré que mamá esté orgulloso de mí.

Mai: Yo también pienso así, además nunca tuvimos padre desde que nacimos, o desde antes, le demostraré a este mundo que no todos necesitamos de un padre que nos mantenga, nosotros somos suficientes- asentí, yo no quiero y no necesito un padre, solo mamá y yo contra el mundo.

Hasta el próximo capítulo...

Hola, lamento si me tardé en actualizar, me enfermé grave y la incapacidad no me dejó ni hacer tareas, ya me mejoré definitivamente y ahí vamos haciendo tareas para tener tiempo, espero les guste esta historia.



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