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- No puede ser. - Murmuré para luego bajar mi mirada a todo su cuerpo, escaneandolo por completo. No habia demasiada luz como para verlo bien pero por lo que podía ver traía muy buen gusto.
Su mano bajó a su pantalón y se acomodó el bulto. Sentí como mis mejillas se calentaban y rápidamente desvié mi mirada hacía su cara. El chico cerró la puerta de su auto de un portazo, todavía se veía enojado.

Me moví un poco para poder verlo mejor y pisé una bolsa que había ahí en el piso, la cual hizo ruido. La mirada del chico rápidamente se fue hacia mi.
Al instante me agaché y tragué saliva.

Unos segundos después escuché como se alejaba del estacionamiento. Me levanté y dirigí mi mirada hacia el, había entrado en la fiesta.

- ¿Por qué tenía que venir justamente en esta fiesta? - Dije solo murmurando para mí, estoy bastante segura de que  mala suerte me persigue.

Me arreglé el pelo con las manos en el espejo retrovisor lateral del auto y caminé hacia la fiesta. Los guardias estaban en la puerta.

- Pase. - Dijo uno de los guardias, bien peinado y con traje. Era guapo, olvidé mencionar que soy muy ojo alegre, pero cuando estoy en una relación solo tengo ojos para mi pareja.

- Gracias. - Le sonreí amablemente y ellos se hicieron aparte para que yo pueda pasar. Pasé tranquilamente y escuché algo detrás.

- ¡Me sonrió! - Escuché, viniendo del guardia el cual me habló. Reí y sacudí la cabeza para luego comenzar a ir más rápido hacia el baño para encontrarme con Sam, temia de que el chico estuviera por ahí.

Entré al baño un poco alterada.

Sam me miró confundida, y se dio vuelta para estar completamente enfrente mío.

- Sam, choqué contra un chico, me fui del lugar y ahora el chico está aquí. - Dije rápidamente mirándola con angustia.

Ella siguió mirándome confundida, levantó una ceja y se rió.

- ¿De qué te ríes? Estúpida. - Dije cruzándome de brazos mirándola mal.

- Estás bromeando, ¿No? - Preguntó confundida.

La miré y me agarré la cabeza con las manos.

- ¡No!, choqué el auto de un chico, me escapé en el momento, robé el auto de mi hermano y ahora el chico está en está fiesta. - Dije todo eso en menos de unos 30 segundos y a Sam literalmente se le cayó la boca.

- ¿Chocaste? ¿Y quién es el chico? ¿Por qué te fuiste en el momento? ¡Te puede meter una demanda! - Dijo rápidamente, casi no le entendí de lo rápido que habló.

- Cálmate, es que yo estaba viendo tus mensajes y cuando bajé la mirada del teléfono vi a un gato pasar, no vi que había alguien atrás y frené de golpe. Y ahí sentí que algo golpeó atrás. Era el chico. - Dije mientras me acomodaba el pelo que se me hizo como un nido.

Sam me miraba sorprendida.

- Con razón te tardabas tanto. Pero bueno, ¿Ahora que hacemos?

- No sé Sam, el chico está aquí y capaz me pida dinero para el arreglo de su auto, ahora no traigo nada. - Hice una pausa y sonreí. - Pero era lindo.

Sam se rió y me metió un codazo, yo reí pero un poco nerviosa mientras me frotaba el brazo.

- Tonta, chocaste y solo piensas que es lindo. - Ella se rió y puso los ojos en blanco.

Yo solo pensaba, "¿Qué iba a hacer?" Si me encontraba capaz me mate o que se yo. Tenía que encontrar la forma de salir de la fiesta ya, no podía dejar que me vea.

MoneyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora