Mi no-vida a tu lado (Alastor x Tú)

|Tres|

Angel Dust

Una vez que terminamos de comer ayude a mi nueva amiga _____ con sus maletas ya que casualmente su habitación estaba en el mismo piso que la mía, obviamente fue casualidad y claro que no le rogue a Charli para que ella se quedara cerca de mi habitación.

Cuando entramos a su cuarto ella se veía algo triste, supongo que era por qué extrañaba su antiguo hogar y ahora tendría que vivir en un hotel rodeada de pecadores pero ese no era el único problema, ¡SU HABITACIÓN ERA HORRIBLE Y LE FALTABA VIDA, LE FALTABA COLOR! obviamente yo también me deprimiría si es que me tocará dormir en un lugar como este así que le ayudaría a arreglar su nueva habitación.

_____ abrió una de sus maletas en la cual tenía varias prendas de ropa las cuales eran oversize pero yo se que ella tiene un hermoso cuerpo y no dejaría que una amiga mía se vistiera de esa manera así que también le ayudaría con eso.

—Oye querida, que te parece si por hoy yo te presto ropa, hasta que vayamos de compras.- Le propuse ya que sería por una buena causa.

—Oh Angel, me parece espectacular tu idea, dejame acomodar un poco mis cosas y enseguida estaré en tu habitación.- Estar con ella era distinto, no sentia que tuviera malas intenciones, emitía una energía positiva igual que la de Charli.

—No te preocupes linda, iré a arreglarme yo también.- Obviamente la maravillosa estrella porno Angel Dust debía lucir espectacular siempre.

Solo espero que Valentino no esté cerca del lugar al que vamos, odiaria que le pusiera una mano encima a mi nueva amiga y aparte según lo que me contó anoche ella no sabía cómo defenderse lo cual me hacía sentir preocupado...

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Luego de demorarme como 20 minutos arreglando mis maletas salí de mi habitación rumbo donde estaba Angel para que prestará ropa ya que el me dijo que por hoy me vestiría distinta a lo que comúnmente solía tener en mi armario, tal vez no le gusta la ropa oversize.

—¡Angel, querido, ya estoy aquí! ¿Puedo pasar?.-
No recibí ninguna respuesta, posiblemente Angel habría cambiado de opinión y ahora no quería prestarme ropa.

Después de sobrepensar un rato la puerta se abrió un olor extraño entro en mis orificios nasales.

—Perdóname por no abrir rápido la puerta _____ esque me ocupe un poquito en mi, pero sin problema pasa y sientete cómoda.-

Su habitación era preciosa, aunque es más pequeña que el lugar donde dormía en casa del señor Morningstar, las cosas estaban muy bien organizadas. Tenía una cama espaciosa y muy cómoda, un sofá en forma de corazón rosa, un tocador blanco con luces alrededor del espejo y un armario donde cabía demasiada ropa, también tenía fotografías suyas.

—¡WOW ANGEL, TU HABITACIÓN ES MAGNÍFICA! resalta tu personalidad.-

—Jajaja tu habitación pronto será igual de hermosa que la mía querida, ya lo verás.-

Después de una hora ya estaba lista para ir con Angel a comprar las alfombras y los cuadros pero cierta persona nos detuvo mientras estábamos bajando por las escaleras del hotel.

—¿Angel, piensas sacarla así? Se ve como una puta y algunos pecadores lujuriosos pensaran mal ya que va acompañada por ti.- Le dijo Vaggie muy enojada.