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-Wow, se calmó.

-Tenía hambre.

-Pero si solo tomaba pecho.

-No, acá tienes fórmula.

-No sirvo para esto- se queja tirándose en el sillón.

Remus se sienta a su lado.

-Como amo tu sillón- suspira hundiéndose en el mientras harry toma del biberón.

-Vive conmigo- pide.

-¿Qué?

-Sí, no tienes hogar y yo tengo mucho lugar de sobra.

-¿Dos habitaciones es mucho lugar?

-Somos un bebé y yo, Moony. Con un ambiente me arreglaría, pero Lily quiso comprar esta casa.

-No creo que sea buena idea, tienes un bebé y sabes que odio los ruidos.

-Debes ayudarme, Remus- pide tomando su mano libre- no puedo, no sé. Ya pensé en matarme cinco veces en esta semana.

-James...

-Solo seríamos rumies, compañeros de casa, cuando quieras traer a alguien me avisas y voy a visitar a Peter.

-Es una buena idea, pero debemos aprender más sobre bebés.

-¿Por qué lo dices?

-Huele feo y yo no fui el que metió su pene- sonrie extendiéndole al niño.

-Creo que Harry no es el único que huele feo acá, sí me refiero a ti.

-Usaré tu baño.

-No dudes en acabarte la barra de jabón-Remus le saca el dedo del medio y sube las escaleras- bueno Harry, acá comienza nuestra aventura- hace una mueca de asco al olerlo de cerca- recuerdame no darte frijoles de la abuela otra vez.

El pequeño Harry ríe y aplaude, divertido.

James sonrie a la par, junto a Remus se siente más tranquilo.

Sun and moon// MoonbucksDonde viven las historias. Descúbrelo ahora