Capítulo quince: Una tregua

857 126 34
                                    


Capítulo quince: Una tregua


El corazón del hermano mayor se detuvo por un tiempo, rápidamente Miguel entra a la tienda de campaña, observando como Lucifer empezaba a abrir sus ojos y a saludar a Miguel con una sonrisa tan gentil nunca antes vista.

¡Sorpresa! ¡Está vivo! -grito Azrael con ambos brazos levantados

Miguel le proporciona un rayo angelical a Azrael que no solo lo saca de la tienda de campaña, sino que lo hace estrellarse contra un árbol.

¡Ahhhhhhhh! -grito Azrael

Te lo mereces -dijo Gabriel

Te dijimos que era mala idea -dijo Jophiel

Valio... la pena -dijo Azrael con una voz adolorida


Sin parpadear Miguel se dirige hacia Lucifer y lo abraza, él le corresponde el abrazo. Después de unos minutos todos los hermanos estaban hablando. Lucifer estaba acostado y tenía a una Charlie muy inquieta en sus brazos y un Azrael celoso sentado aun lado de él. Hablaban de que el poder de Lilith no era de ella, en realidad era el poder de Miguel que estaba contenido en una esfera divina.

¿Por qué tienes algo así? ¿Contener tu energía? -preguntó Lucifer

Tu no lo has visto entrenar. Siempre está enojado y necesita algo donde resguardar su energía porque si no el cielo estaría en peligro todos los días -dijo Azrael

¿Tu? ¿Enojado? -preguntó Lucifer

Ha estado enojado desde tu destierro -dijo Gabriel

Miguel dirige una mirada de odio a Gabriel.

Ah, bueno, con razón no me mato, siendo tu poder no me podía dañar tanto -dijo Lucifer sonriéndole a Miguel

Todos -Miguel miró a todos sus hermanos -Fuera

Tsk... aguafiestas -dijo Azrael tomando a Charlie de los brazos de Luci y saliendo con sus hermanos

Miguel -dijo Lucifer cuando estaban solos y Miguel había creado una burbuja entre ellos dos

Ya no puedo hacerlo Luci... el hechizo para convertirte humano, tu corazón está débil y yo... no me pienso arriesgar -dijo Miguel

Confío en él -dijo Lucifer

Yo no, yo no puedo confiar en los humanos -dijo Miguel

Y soy yo el rey del infierno -dijo Lucifer riendo

Miguel mira seriamente a Lucifer

Confia en mi -dijo Lucifer

Tsk... solo esta vez -dijo Miguel abrazando a Lucifer

Pasaron tres días juntos acampando y compartiendo sus vidas junto a las comidas y bebidas de la tierra humana.

Debo de admitir, que los capuchinos humanos son un algo -dijo Jophiel

Aghh, es mejor el macchiato helado -dijo Lucifer

Estas loco, lo mejor son los frapuchinos -dijo Azrael

Eso no es café, solo es hielo -dijo Uriel

Al pasar los tres días se despidieron, Miguel y Azrael le prometieron el hechizo a Lucifer para unos meses. Pues era uno de los hechizos más complicados y tenía un proceso muy laborioso.

Parece que Lucifer aun es tu debilidad -dijo Azrael mirando como Miguel veía a Lucifer teletransportandose

Cállate -dijo Miguel

No, en serio, sentí que nos ibas a matar si algo le pasaba a Luci -dijo Azrael

Matare a Lilith -dijo Miguel

Mmm, si, esa humana se lo merece. Pero de verdad, aun creo que nos sacrificarias a todos nosotros por Luci -dijo Azrael

Mmm -dijo Miguel retirándose

¿Qué? ¿Cómo que "Mmm"? ¿No lo niegas? -preguntó Azrael

Miguel lo ignoraba mientras se retiraba

Ehhh... ¡Miguel! ¿No lo niegas? ¡Miguel! -gritaba Azrael persiguiendo a su hermano.


Habían pasado casi dos años de la relación de Lucifer y Alastor, se veían casi todos los días de la semana y duraban todo el día juntos haciendo varias actividades divertidas o simplemente estar sentado en un sofá escuchando la radio, aburrido o divertido, siempre estaban juntos. Lucifer aún tenía la joya que le quería dar a Alastor, porque lo estaba guardando para un momento muy, extremadamente muy especial.


Era una noche en la cual Lucifer se despidió de Alastor y regresó al infierno, para su sorpresa se encontró a Adam. Al principio quería correrlo, destrozarlo, pero Adam rápidamente le pidió paciencia y le explicó lo de Lilith.

Así que si... me utilizó al igual que a ti. Cuando vio que no era una figura importante en el cielo para obtener nuevamente su título y pase al Edén simplemente se fue. Le tiene miedo a Miguel, es el único al que le tiene miedo, por su poder y astucia. Por eso intentó matarlo, para que no interpusiera en su camino -dijo Adam

Mmm ¿y tú qué haces aquí? ¿no deberías estar en el cielo? -preguntó Lucifer

Tsk... solo quería hacer las paces contigo, decirte que yo no soy el enemigo -dijo Adam

¿Por qué? ¿Para no mandar a mis hermanos tras de ti? -preguntó divertido Lucifer

En parte sí... pero... es agradable saber que no fui el unico idiota en caer en una trampa amorosa -dijo divertido Adam, aunque a Lucifer no le hizo tanta gracia.

Lucifer aceptó la disculpa de Adam, en parte sabía que era porque también le tenía miedo a Miguel y este estaba más cabreado que nunca, según sus hermanos. Ya era muy noche y estos dos parecían estar en fiesta, tomando y hablando de sus nuevos amores. Lucifer con Alastor y Adam con una supuesta Lute.

¿Tu? ¿Enamorado de otro humano? -preguntó Adam molesto

Tsk, estas como Miguel -dijo Lucifer

Es que si... ¿nunca aprendes? -preguntó Adam

No lo conoces -dijo Lucifer

¿Y él a ti sí? -preguntó Adam

Lucifer lo mira seriamente

Lo sabía -dijo Adam tomando desde la botella de vino

No es necesario que me conozca, Miguel y Azrael estan ayudandome para convertirme en humano, al menos temporalmente -dijo Lucifer

Mmm... pero el caso es que él debería amarte por quien realmente eres -dijo Adam

¿El rey del infierno? -preguntó Lucifer

Un ángel, un ser divino, no humano -decía Adam -es solo una opinión -dijo Adam acostándose en el suelo.

Lucifer lo mira, tal vez si tenía razón.

Finalmente la noche se convierte en día. Adam se despide con mala cara y resaca de Lucifer y regresa al cielo. Lucifer deja a Charlie con sus hermanos del cielo y se teletransporta al mundo humano. 

El café prohibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora