miopía //spartor// ||segunda parte||

capitulo 30

Ya era martes por la mañana. Sparta entró a su escuela. Caminó por los pasillos. Recordaba cuando todos lo veían con miradas juzgadoras. Mientras caminaba se encontró con Musi sentado en un banco mientras abrazaba sus piernas y miraba al suelo desesperadamente. Sparta se acercó a él para descubrir lo que pasaba.

Sparta: ¿Musi, estás bien?

El mayor levantó la mirada. Tenía ojeras, sus ojos hinchados y una mueca de preocupación en el rostro.

Sparta: ¿Qué te pasó?

Musi: Al parecer el canino remplazó a su amo por un filete más caro.

El castaño arqueó una ceja. No entendió a lo que se refería.

Sparta: ¿Qué quieres decir?

Musi: No quiero hablar de ello.

Escondió su cabeza entre sus piernas. Sparta puso su mano en su espalda para demostrarle que estaba ahí para apoyarlo.

Sparta: Oye, si lo guardas puede que te dañe más. Mejor déjalo salir.

Musi: Me mintió.

Sparta: ¿Quién te mintió?

Musi: aunque el perro haya cambiado no deja de ser un lobo que desgarra a sus presas con los colmillos de su boca.

Sparta: Pero no me lo digas con metáforas.

Musi: Los caramelos solo estaban cubiertos de chocolate, en realidad eran amargos como la cáscara del limón.

Sparta: Dame nombres al menos.

Musi: Un simple plebeyo luchando por el cabrito que el rey fácilmente puede arrebatárselo.

El menor suspiró.

Sparta: Tal parece que no me lo dirás.

Musi se quedó callado. Sparta no sabía exactamente qué hacer. El timbre sonó marcando el inicio de la jornada.

Sparta: Ya me tengo que ir.

Se dirigió a su salón para recibir los siguientes exámenes que le seguían.

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Sparta salió de su salón porque ya era hora del receso. Estando ahí pudo ver a lo lejos a Trollino y Musi discutiendo. No podía alcanzar a escuchar, pero de un momento a otro, Musi, golpeó a Trollino en la cara. Esto sacó de honda al castaño quien decidió ir a separarlos. Corrió hacia Musi y lo tomó de los brazos para que no pudiera ir hacia Trollino.

Musi: ¡Eres un maldito!

Trollino: ¡Ya te dije que yo no hice eso!

Musi logró soltarse de Sparta y se lanzó a Trollino para seguir golpeándolo. El castaño intentó separarlo, pero le fue muy difícil. La furia de Musi se intensificaba.

Musi: ¡Te odio! ¡Te odio! ¡Te odio!

Trollino: ¡T-Te estoy diciendo que no hice eso! ¡Él ni siquiera me deja acercarme!

Musi: ¡Eres un maldito mentiroso!

Rius intervino ayudando a Sparta a separar a Musi. Sujetaron bien de sus brazos para que no pudiera escaparse. Trollino se levantó con algo de dificultad y luego miró a la multitud que los observaba.

Trollino: ¿¡Qué están mirando!? ¡Piérdanse!

Todos se alejaron y siguieron en lo que estaban. El azabache vio a Musi.