miopía //spartor// ||segunda parte||

capítulo 20 - Ilusión

No pasó demasiado tiempo hasta que se separaron del abrazo.

Sparta: No entiendo...

Raptor lo observó esperando a que le contara más.

Sparta: ¿Por qué....? O-Olvidalo.

Raptor: Tranquilizate *sonríe* Todo estará bien. ¿Sí?

Tomó las manos de Sparta.

Raptor: Hay algo que me gusta hacer cuando tengo algún problema.

Sparta lo vio y sonrió mientras levantaba una ceja.

Sparta: ¿Mirar al cielo o a la nada y sonreírle?

Raptor: Eso también.

Rió un poco. Colocó la mano derecha de Sparta en su hombro y luego colocó la suya en la cintura del menor.

Raptor: Eso lo hacía porque no tenía a alguien con quien estar, pero ahora te tengo a ti.

Lo juntó un poco más a él.

Raptor: Y un baile contigo me haría sentir mejor. Pienso que lo mismo podría pasar contigo.

Sparta: ¿No creo poder bailar conmigo mismo, sabes?

Ambos chicos rieron.

Raptor: Me refiero a que bailes conmigo para hacerte sentir mejor o al menos distraerte un poco.

Sparta: Está bien.

Comenzaron un vals. El menor era guiado por el contrario. Aunque no hubiera música ese fue un momento mágico para ambos. Sparta se sintió más tranquilo cuando era guiado por Raptor, se sentía contento y alegre. Estuvieron bailando un largo rato hasta que tropezaron y cayeron al suelo. Ambos chicos rieron un poco. Raptor se recostó de lado para poder ver a Sparta y viceversa.

Raptor: ¿Ya te sientes mejor?

Sparta: Claro *alegre*

Raptor: Me agrada.

Acarició su mejilla. El menor se sonrojó por esta acción.

Raptor: Te amo.

Sparta: Y yo a ti.

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Trollino estaba sentado en la silla de su escritorio en su habitación. Se encontraba muy pensativo, ya que, no sabía qué debía hacer para poder completar su tarea de historia. Abrió uno de los cajones del escritorio para sacar algún dulce o algo para distraerse, pero al abrir el segundo cajón pudo apreciar una fotografía. En esta se encontraba él con su mamá y su hermanito. Recogió la fotografía y la admiró. Se sentía nostálgico.

//Flashback//

Trollino hacia su tarea en la mesa de la cocina. En ese momento tenía cinco años. Mientras escribía como podía su mamá se asomó a ver lo que estaba haciendo.

MR: ¿Qué está haciendo mi niño?

Trolli: Trato de escribir.

MR: Wow, tienes una muy buena letra. Muy buena para tu edad.

Trolli: N-No lo creo...

MR: ¿Acaso no lo ves?

Trollino negó con la cabeza.

MR: Ya sé que tu papá es muy perfeccionista, pero debes saber que eres bueno. Tú eres muy inteligente y fuerte.

Trollino sonrió y la abrazó.