ENSÉÑAME A AMAR |FEMREADER X MIZU |SAMURAI DE OJOS AZULES

10

Las afueras de Londres.

No nos había tomado nada de tiempo llegar allí, Ringo se había encargado de encontrar un medio de transporte para llegar. Las señales del señor Thomas eran precisas, todo indicaba que decía la verdad. Vaya, cuanto daño habrá hecho toda esta gente para que los quieran muertos.

Todos parecían tener sed de ellos, sed de sus muertes pero nadie mas que Mizu. En sus ojos había algo mas que venganza y era el placer se estar cerca a sus objetivos.

-Vengan es por acá -dijo ella mirando a todos los lados -Lim, permanece detrás mío por favor.

-No te preocupes tengo una pistola en mano -dije quedándome atrás un momento.

-Lo se, pero no te separes de mi -por qué de repente sonaba tan posesiva.

Obedecí por el simple hecho de que sabia que esto se iba a poner muy feo en un momento.

...Como dijo el samurai, lo mas probable es que Fowler este con esos dos desgraciados. Así que, irán a las afueras de Londres, por los lados del gran cementerio. Es una zona tenebrosa y sobra decir que peligrosa. Les recomiendo que sean muy sigilosos...

Había neblina pero por suerte podíamos observar nuestro entorno con normalidad. En seguida Mizu puso su mano sobre nis hombros en señal de resguardarme. "Hay gente por aquí" fue lo que dijo mientras me resguardaba mas hacia la pared.

¡Bang! ¡Bang! ¡Bang!

Nos estaban disparando.

Sin pensarlo dos veces, me solté del agarre de Mizu y salí por la esquina, dispare a dos hombre que estaban apuntando hacia nosotros sin un solo ruido y sin ningún titubeo. Ambos cayeron al suelo.

Ambos, Ringo y Mizu miraron a mi persona sorprendidos.

-Soy arquera, ningún objetivo se me escapa. Ademas, el silenciador funciono de maravilla... 

Ambos sonrieron hacia mi, y sacaron sus respectivas armas de defensa. Ringo con sus cuchillos, y Mizu su brillante espada.

-Muy bien samurai, es tu turno, tienes la entrada libre -dije cargando mi pistola y teniendo a la mano uno de mis cuchillos.

Mizu asintió.

-Quédense aquí, por favor manténganse con vida, yo entraré y estoy segura de que esta fortaleza tiene trampas a cada centímetro. Prométanme que si para el anochecer no he salido, se irán -dijo con mucha fortaleza.

-Estas loca!!! Si te tardas yo entro sin pensarlo!!! -lo que decía me podía de los nervios -No te dejaremos aquí tirada, si vinimos los tres, nos iremos los tres Mizu.

-NO! No te atrevas a entrar Lim!! Este es mi asunto no el tuyo, no te llevare a una muerte estúpidamente -dijo con su semblante agustiado, se acerco un poco mas a mi; titubeaba en exceso.

-Mizu... te juro que si tardas, no dudare en entrar y no me dirás lo contrario porque no te dejare ahí sola...

-Lim te amo... -ya no titubeaba, y simplemente se acercó a mi y poso sus labios sobre los míos con mucha pasión. Era el beso mas intenso que alguien jamas pudiera darme. Lo hizo con tanto sentimiento que parecía ser un beso de despedida.

-Yo iré por ti Mizu, no te dejaré... -fue lo último que dejo pronunciar antes de desaparecer por la neblina.

Ringo, simplemente quedo perplejo.