Stars - Una Historia de Sailor Moon

Capítulo V - Entrenamiento

Tokio De Cristal, Siglo XXX

Endymion llegaba a la biblioteca pero no veía a Serenity por ningún lado, quizás Pluto entendió mal o le mintió... pero ¿por que? Al fin y al cabo Serenity es su esposa y tiene todo el derecho del mundo a verla. Desde que llegó no ha podido hablar a solas con ella, y es que se encuentra molesto con su actitud.

Últimamente Serenity lo ha desafiado, haciendo lo que ella quiere invalidando su autoridad como rey de Tokio De Cristal. Desde la desastrosa batalla con Black Moon su esposa no fue la misma y ese fue el punto de quiebre de su matrimonio. Ahora bien, con la llegada de la gente desde Kinmoku eso se ha acentuando de tal manera que no la reconoce y eso mas que encantarlo lo irrita, lo pone de mal humor y le desagrada.

Termina por rendirse y al voltear ve a un rincón a la bella reina de Kinmoku muy concentrada leyendo. Kakyuu es tan diferente a Serenity en todo sentido, ella si se comporta como lo que es, una autentica reina... solo espera que el entrenamiento que empieza mañana no cambie su personalidad ni carisma.

-Kakyuu, ¿que haces sola en este lugar y a esta hora?

-Endymion, hola que gusto verte... pues aquí leyendo un poco. Es muy interesante la historia de tu planeta y el Milenio de Plata.

-Me alegra que quieras conocer un poco mas de nosotros... ¿por que estas sola? Tú marido no debería abandonarte y menos después del dolor que están pasando ambos.

Kakyuu se pone seria un poco y aclara ciertas cosas -Cada uno lidia con el dolor a su manera Endymion... aparte nuestro matrimonio con Seiya es un acuerdo, somos los mejores amigos desde que nacimos y nada más.

Endymion se sorprende -¿Nada mas?, ¿no se casaron por que estaban enamorados?.

-No, solo nos casamos porque fue nuestro destino. Seiya era el General principal de mi padre a pesar de su corta edad... posee el poder de las estrellas y cuando el Cristal del Fuego reaccionó a él mi padre nos dijo que debíamos casarnos por el bien de Kinmoku. El Cristal de Seiya cambió por completo ya que tiene ambos poderes por eso me superó de inmediato en cada batalla.

Endymion internamente se alegro de saber que el corazón de Kakyuu esta libre... siente que tiene una pequeña posibilidad.

-Entiendo, pero ¿por que quieres luchar ahora Kakyuu?

-Porque en la batalla fui la mas débil, me siento culpable de que Seiya y mi hijo me estuvieran protegiendo todo el tiempo... tengo a mis Sailors pero no se concentran totalmente en derrotar al enemigo porque deben estar vigilando que no me dañen. No quiero volver a ser una carga, quiero ayudar y pelear aunque sacrifique mi vida.

-No eres una carga Kakyuu - Endymion se acerca y toma sus manos -Se que para Kinmoku, Seiya y tu hijo eres lo mas preciado, entonces se protege lo que uno ama.

Kakyuu se sonrojó -Aún así Endymion, yo también quiero proteger a quienes amo, por eso admiro a tu esposa.

-Si es poderosa y por lo mismo... -Endymion se calla

-¿Que pasa Endymion?

-Serenity al ser poderosa me hace sentir siempre que no necesita ser protegida por mi, que no necesita que la salven y eso en el fondo nos separó.

Kakyuu se sorprende -¿Están separados? -Seiya tenia razón, piensa ella -No me lo imaginaba pero Endymion, hasta la guerrera mas fuerte a veces necesita ser protegida aunque no nos demos cuenta.

-¿Me dejarías protegerte Kakyuu?

-Si, por supuesto que si Endymion

Ambos sonríen y Endymion le entrega una rosa roja. Se enfrascan en una amena charla que dura bastante, sintiendo que algo crece en ellos rápidamente y alegra sus solitarios corazones.