•.𝐃𝐃𝐂.• | ¿Que tanta probabilidad hay de que el chico del que estuviste enamorada toda tu adolescencia, ahora sea tu vecino? O ¿Quizá haya algo más que eso?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Ya pasó una semana de que aquella prueba saliera positivo, obvio al día siguiente fui a hacerme la prueba de sangre para estar segura y en efecto, salió más que positivo.
Cornelio aún seguía de viaje, pero mañana están de regreso en casa, asi que hoy iría a comprar unas cosas para la sorpresa que le haré a mi novio y a su familia, asi que me aliste y salí para ya subirme a la camioneta. En eso me llega un mensaje.
Shantiyi <3
- Hola Julie, ¿Cómo estás? -
- Hola, bien corazón y tú? -
- Bien también, ¿Se pondrá saber que harás hoy? -
No quería decirle lo que haría hoy, pero se que también lo hace para salir un poco conmigo, ya que no lo hemos hecho últimamente, quizá lo convierta también en mi cómplice al igual que Ashley.
- Saldré a comprar algunas cosas, ¿Gustar ir conmigo? -
- Siii, quiero ir -
- Bueno, alistate, paso por ti en 20 -
- Está bien, acá te esperaré -
Termine de hacerlos mensajes con Santi, y tome camino hacia la casa de mi suegra para recogerlo. Cómo bien se lo dije en 20 minutos ya había llegado a su casa, bajé y toque la puerta.
- Sra. Alma: Hola mi niña, ¿Cómo estás? - preguntó mi suegra, mientas saludaba.
- Maria: Hola suegra, muy bien, ¿Cómo han estado ustedes? - pregunté ahora yo.
- Sra. Alma: Bien mija, nomás que el Santi anda bien emocionado porque saldrá de paseo contigo - dijo.
- Maria: Si, yo también ando bien emocionada, ya teníamos rato sin salir, ni nada - mencioné.
- Santi: ¡Ya estoy listo! - dijo y se acercó a saludarme y darme un abrazo.
- Maria: Bueno, hay que irnos antes de que se nos haga tarde - dije y asintió.
- Santi: Ahorita regreso ama - ella asintió.
Nos despedimos de mi suegra y tomamos camino a una plaza muy famosa de aquí. En el camino íbamos platicando, cantando, echando relajo, sinceramente ya extrañaba estos momentos con Santi.
- Maria: Santi, ¿Será que te puedo hacer una pregunta? - mencioné.
- Santi: Si, adelante - dijo.
- Maria: Desde que te conocí, te dije que tú y Ramón serían algo mío, más que cuñados, ¿Te acuerdas? - hablé.
- Santi: Si, tus bebés, tus niños pequeños - respondió confundido.
- Maria: Bueno, vamos a ir a la plaza que te dije a comprar unas cosas sorpresa - dije.
- Santi: ¿Algo para nosotros? Y ¿Porque si es sorpresa dejaste que viniera contigo? - preguntó dudoso.
- Maria: No son para ustedes, osea si pero agh, no se cómo explicarte, mejor vamos a bajarnos y haya te digo - dije y asintió.
Nos adentramos en aquel lugar, mirando todo a nuestro alrededor, hasta que encontré la tienda indicada para mí sorpresa.
- Maria: Aquí está la respuesta a tus preguntas de hace rato - dije mientras me adentraba en aquella tienda.
- Santi: Es mentira, ¿Verdad? - preguntó al tiempo que ve las cosas.
- Maria: No es mentirá, seré mamá - dije feliz.
- Santi: Que felicidad - festejo y me abrazo pero sin lastimarme. - ¿Por qué no me dijiste?
- Maria: Porque era sorpresa, aunque tienes que guardar este secreto, eh - dije y asintió.
- Santi: Bueno, guardaré este secreto, hasta que estés lista para revelarlo - apoyo.
- Maria: Muchas gracias mi bebé - dije y le di un beso en su frente, ese era mi muestra de cariño hacia él y Ramón.
Luego de esa pequeña pero linda plática entre nosotros, nos dispusimos a buscar aquel regalo perfecto para darle la sorpresa a Cornelio, pues quería que fuera algo lindo y quedará grabando en nuestra vida.
- Santi: Mira Maria, ¿No te gusta esto? Lo puedes poner junto a las pruebas que te hiciste, ya la armaste - sugirió.
- Maria: Me parece perfecto, me convenciste, así que me lo llevo, pues - dije feliz.
Escogimos otras cosas, también me dio algunas ideas para decirles a la familia de Cornelio a nuestros amigos, y aunque me haya gustado la propuesta, se me ocurrió una que era como divertida, pues.
[...]
Ya habíamos terminado de hacer la compras, nos fuimos al parque, compramos algunas cosas para nosotros, unas para Monchi, deje a Santi en su casa y ya tomé el camino hacia mi casa.
Deje todas las cosas en la sala y fui hacia el cuarto para poder tirarme en la cama, ya que estaba muy cansada, en eso me entra una llamada de mi chico.
Mi Luna 🌙
- Hola amor, ¿Cómo estás? -
- Hola corazón, bien y tú? -
- Bien cansado la neta, ya quiero llegar a la casa para acostarme y estar contigo, pues -
- Tranquilo, ya mañana estarás aquí conmigo, es más cuando llegues te tendré lista una sorpresa -
- ¿Que será? -
- Pues es sorpresa bebé, amor, mañana lo descubrirás -
- Ya me dejaste con la duda, ahora quiero llegar lo más rápido posible -
- Que simple eres -
Estuvimos un rato platicando, lo extrañaba tanto, pues que platicábamos en nuestros momentos libres, no era lo mismo al estar con él, pues, así que ya me hace falta, para poder darle esa sorpresa que me he callado toda esta semana, ya no aguanto más, por gritarlo a los cuatro vientos que seré mamá.
Luego de una hora y media, terminamos la llamada, me metí a bañar para poder dormir fresca pero antes de eso, me puse a ver una película, porque si no, no puedo dormir. Haber que nos depara mañana el destino.