CAPÍTULO 4

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Nos encontrábamos en la playa con todo preparado. John B y JJ se encargaban de llevar el barril de cerveza. Pope llevaba los vasos y Kiara la manguera del barril. Cuando encontramos el sitio perfecto, JJ con la manguera en la mano le echó cerveza en la cara a John B, cosa que nos hizo gracia a todos la cara que puso John. Este, empezó a servirnos a todos un vaso, el único que no lo cogió fue Pope. Poco a poco iba viniendo cada vez más gente.

Para entender Outer Banks hay que entender el páramo y como dice John B, es como un burrito de tres capas: estamos nosotros y nuestros amigos, los colgados de la clase trabajadora. Luego están los Kooks, ricos con segunda residencia y como dice John B, unos pijos estirados de internado. Después están los turistas, o como los llamamos nosotros: turilerdos. No se enteran de nada, vienen una semana de vacaciones con sus familias. Y por último, cuando empiezan a venir chicas que JJ o a John B les atraen, son llamadas carne de cañón, lo cual es repugnante.

En la fiesta, JJ y yo cruzamos nuestros brazos e hicimos una competición de quién se bebe el vaso de cerveza antes. Llamamos la atención de la gente y en segundos nos veíamos rodeados de mucha gente. A pesar de casi ahogarme,  los dos conseguimos bebernoslo al mismo tiempo. Me sonrió con admiración y chocamos los cinco.

Luego, JJ que iba bastante contento, por así decirlo, se subió a una rama de un árbol caído y gritó “somos una familia” mientras casi se cae. Me reí de él y me fui del círculo que se había formado.

A JJ le gustaba hablar con desconocidos en esos momentos así que le deje ahí.

Me fijé en cómo John B y Pope ligaban con unas chicas. La chica que estaba con Pope no parecía muy feliz, le ponía caras raras. Después, me fijé en que Kiara estaba haciendo lo mismo con otro chico, seguro que estaba hablando sobre el horóscopo.

Tuve que pararme en seco, puesto que a unos metros de distancia vi a alguien que no me esperaba ver.

—¿Qué hace ella aquí?— pregunte lo suficientemente alto como para llamar la atención de Kiara y John B.

Era Sarah Cameron, la princesa de los kooks. Era mi mejor amiga junto a Kiara, eramos inseparables, pero con el tiempo me distancie de ella y más adelante, en décimo fue la enemiga de Kiara. John B trabajaba en el barco de su padre, así que solía verla.

Con ella, estaba Topper Thorton, su novio, un capullo integral que menosprecia a los Pogues. También, estaban Kelce, un amigo de Topper, y el hermano de Sarah, Rafe Cameron.

Esa última persona, no me molestaba tanto. Al verle sonreí como una estupida. Kiara vino hasta mí.

—¿Le has dicho que venga?—me pregunto acusándome. Se refería a Rafe. Supongo que se pensaba que le había dicho que viniese y después él se lo comentó a su hermana.

—No, ni siquiera he hablado con él en todo el día— le expliqué— No era difícil que se enteraran, Ki. Igualmente, solo tienes que ignorarla y pasarlo bien—me sonrió a modo de disculpa y volvió con el chico.

—Sarah ten cuidado—le repetía una y otra vez Topper.

Sarah estaba llamando la atención, como siempre. Estaba subida a una especie de farola. Mientras él le ayudaba a bajar, Rafe estaba con una expresión cansada. No se llevaba muy bien con su hermana. Volteo la cabeza y finalmente me vio.

Fui andando hasta él y me fijé como se le había cambiado la cara mientras se acercaba a mi. Nada más tenerme en frente de él me puso una mano en la nuca y me hizo besarlo en la boca. Antes de sacar cosas de contexto, tengo que decir que no somos novios. Solo a veces nos vemos para pasarlo bien, nada más.

—¿Qué haces aquí?—Le pregunté cogiendo aire.

—¿No quieres que este? Si quieres me voy—bromeó.

REFUGIO - OUTER BANKSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora