𝐀lma nunca creyo que alguien seria capaz de amarla, por eso se acostumbro a los malos tratos de Simon. pero un dia llego alguien más, alguien que la trata como realmente se merece; Matias Recalt
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–¿Qué somos?–pregunte mientras el acolchado blanco tapaba mis pechos, mientras miraba cómo Simon se vestía. Puse mi mano tapando la luz que entraba por la ventana, haciendo sombra en mis ojos.
–¿Otra vez con eso?–respondió con fastidio el morocho.
Las veces que le pregunte "¿Que somos?" desapareció por semanas. Hace dos años que venimos teniendo un vinculo, pero me deja muy en claro que no quiere formalizar nada, cosa que me rompe de a poco el corazón.
Pero hoy me anime a volvérselo a preguntar, rezando para que no vuelva a escapar.
Apreté mis labios con su respuesta.
–Bueno, ¿Ya te vas?–rompió el silencio.
–¿Qué? Te iba a acompañar a las grabaciones hoy–dije en un tono bajo mientras me estiraba para alcanzar mi sostén para luego vestírmelo.
No iba a acompañarlo, iba a mi primer día de trabajo. Pero aún no le dije porque quería que sea una sorpresa.
–Bue, yo ya me tengo que ir. No sé cómo vas a hacer–dijo el morocho ya vestido, caminando hacia la puerta.
–Pero, Sim...–me interrumpió.
–Arréglate, yo no te pedi que vayas–dijo para luego dar un portazo que hizo sobresaltarme.
Me quede helada. No entendía sus cambios de humor tan repentinos.
No entendía como anoche me trataba bien, luego nos acostamos y ahora me trataba así.
Suspire y busque mi ropa, me vestí y me pare de la cama, lista para comenzar una nueva rutina. Tuve la suerte de que a Bayona se le bajo una maquillista, y mi mejor amiga que trabaja allí metió un curriculum mío sin consultarme. Y aunque al principio me había enojado un poco, luego comenzó a agradarme la idea.
Simon ya se había ido, dejándome sola en su casa. Pero por suerte me dejo las llaves en la puerta.
Cuando el Uber me indico que estaba afuera, cerré la puerta y me subí al auto, nerviosa por ser la nueva del rodaje. Todos se conocían hace dos meses, y yo era la única nueva. Solo conocía a mi mejor amiga, Sofia; y a Simon.
☾
Le pague a Silvio, el chofer del Uber con el que había charlado todo el viaje y luego baje del auto.
