𝐀 𝐍𝐨𝐯𝐞𝐥'𝐬 𝐁𝐞𝐚𝐬𝐭 𝐖𝐨𝐫𝐥𝐝 | 𝐄𝐒𝐏𝐀Ñ𝐎𝐋

𝟖𝟐. 𝐃𝐫𝐞𝐰 ✔

Harvey trepó a un árbol ágilmente mientras sus cachorros hacían lo mismo. Les enseñó a subir sin hacer ruido y rápidamente, y lo estaban haciendo bien. Les enseñó a rastrear a sus presas por el olor y las señales físicas. No se consideraba el mejor cazador, pero estaba seguro de que las humildes habilidades que conocía ayudarían a su descendencia a sobrevivir.

Harvey permaneció en su posición mientras hacía un gesto con su gran cabeza hacia la dirección de la presa. Esta vez, era una cierva vieja la que estaba enferma. Había poco peligro y permitió que sus hijos se hicieran cargo.

Hijos... Le dio vueltas al término en su mente. Ya se había acostumbrado al vocabulario de Drew. Ahora era algo natural para él. Observó a su hijo mayor acechar en silencio a la cierva, mientras se mantenía oculto. Dee estaba bien y aún no se había dado cuenta de su proximidad a la criatura. Harvey no los había sacado por mucho tiempo, pero estaban adquiriendo habilidades rápidamente.

Harvey se dio cuenta de que tenían mucho más talento para la caza que él. Sin duda, algún día lo superarían en fuerza. Ahuyentó de su mente la comparación negativa. Estaba feliz por ellos y orgulloso. Cuanto más fuertes y hábiles se volvían, mayores eran sus posibilidades de sobrevivir y encontrar futuras parejas.

Dee se abalanzó sobre la desprevenida cierva, pero la presa reaccionó y salió disparada hacia adelante. Las garras de Dee se clavaron en la piel, pero se soltó. La cierva corrió con sangre goteando de sus heridas, pero fue emboscada por un Smash que la esperaba.

Aunque Harvey encontró este tipo de trabajo en equipo extraño para su clan, no lo desalentó de inmediato. A veces, ser astuto les ayudaba y promovía la flexibilidad. Aun así, tendrá que asegurarse de que son totalmente capaces de cazar en solitario en el futuro. Después de todo, no siempre podrían confiar el uno en el otro.

Harvey miró por encima de la línea de árboles hasta que vio un halcón familiar. Rowan daba vueltas sin prisa. Aunque no podía distinguir los rasgos del otro hombre, estaba seguro de que sus ojos se encontrarían. Rowan cambió de rumbo e indicó que debía seguirlo.

Harvey vio a sus cachorros comerse a la cierva. La comida sería suficiente para los tres, pero no para Harvey y Rowan también. También tendrán que atrapar presas para Drew y el resto.

Harvey sintió que una sonrisa se dibujaba en sus labios. La idea de volver con su bella compañera nunca dejaría de darle alegría. Incluso ahora, mientras estaba fuera, de vez en cuando sentía que el vínculo se agitaba. Se dio cuenta de que Drew estaba tratando de ver cómo estaba de esa manera y eso hizo que su corazón se hinchara de afecto.

No había pasado ni un año desde que Drew llegó a su vida, pero parecía que había sido más largo y más corto. Era como si ella hubiera estado con él mucho más tiempo y, sin embargo, apenas habían tenido tiempo juntos. Pero se alegró, no... Estaba emocionado, asombrado y maravillado de poder pasar el resto de su vida con ella.

Apuró a sus cachorros y ayudó a terminar lo que no pudieron. Dejó que los niños guiaran y les cuidó las espaldas mientras recordaba el momento en que conoció a su madre. Desde entonces, había cambiado y seguía siendo la misma. A pesar de todo, ella todavía se sentía como la Drew que conoció en Camel Hump Valley, pero él había sido testigo de su crecimiento.

Seguía siendo sarcástica, pero no menospreciaba su autoestima como solía hacerlo. Ella había ganado confianza en sí misma y lo había ayudado con la suya. Solía refunfuñar palabras cuando pensaba que los demás no podían escucharla, pero ahora las decía directamente. Drew todavía se guardaba algunas cosas, pero había abierto gran parte de su corazón. Lo más importante es que Harvey pudo ver que, a pesar de sus preocupaciones, ahora era mucho más feliz. Esperaba poder seguir trayendo alegría a su vida, tal como ella lo había hecho por él.