XIV

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Espero que la novela tenga 40 capítulos, así que crucemos los deditos para que logremos hacer algo chido. ❤️

Feliz Lectura…


Hace muchos años que no me había puesto a pensar en el linaje de mi madre ni en lo que representa ser su hija.

Tuvo una infancia difícil.

Mamá siempre supo que la magia no importa si es negra o blanca, que lo que importa es cómo decides usarla.

Mi madre es la hija más pequeña de la reina de las brujas negras, y yo soy su única hija. Por lo tanto soy princesa de las brujas negras, y heredera del clan completo y sé que lo soy porque mi tía no puede traer hijos al mundo para que ella sea la que gobierne, necesita herederos y nadie que no lleve la sangre Hellington puede gobernar el clan.

Yo la llevo y mis hijos la llevarán, o hijas.

La abuela sabe que soy la esperanza para su trono el hacerme tener hijas que puedan heredar el trono al que estoy destinada a usar, pero nunca lo he querido y mi madre tampoco. Así que no.

No quiero un lugar vacío como es el trono, quiero ser libre de hacer lo que yo quiera sin tener que sentarme en ese oscuro y triste lugar, que es vacío y frío, que no tiene calor que se sienta agradable, no te da ese…

No.

El trono de las brujas negras finalizará conmigo.

—Tengo unas cosas que hacer antes de ir a casa—me giro a Carson que sostiene las riendas de Sombra—. Puedes llevártela, no tiene problemas con que la lleves a casa que necesita descansar.

—¿Quién vendrá por ti?

—Puedo irme caminando, necesito comprar unas cosas.

Asiento despacio antes de sonreírle despacio, subo sobre Sombra que se acomoda debajo de mí, Carson sostiene todavía la rienda antes de llevar su mano a mi pierna y dejarla ahí.

—Llegaré algo tarde, así que no me esperes despierta.

—Pensaba darte una bienvenida—arquea una ceja entendiendo a qué me refiero—, si no la quieres…

—Será mañana—promete en un tono oscuro y bajo—. Ahora vete que tengo que hacer cosas que no involucran a mi mujer.

Asiento tomando las riendas de Sombra para alejarme de Carson y hacer que la yegua nos lleve lejos de su amo que se pierde atrás de nosotras mientras nos acercamos a la aldea de Cazadores que está a un kilómetro de aquí.

Sombra camina tranquilamente por la calle que está transcurrida de gente a esta hora que es la que más usa la gente para hacer sus compras para la tarde, y el festival por la luna roja es unos días y es a la cena que nos invitaron…

Llegó a la aldea de Cazadores pasando mi campo con la tranquilidad de que nadie puede pasarlo que no sean los que viven aquí, una de las Cazadoras me ve en la yegua de mi marido y no duda en acercarse cuando bajo a comprar algo de arroz que me gusta como lo vende la señora de este puesto en específico.

—¿Y Carson?

—Se quedó en el pueblo a comprar unas cosas.

—Seguro a eso—entendí eso.

Miro a la Cazadora con cuidado.

Pecas en los pómulos y parte del mentón, el cabello rojo como zanahoria en tono opaco, con los dientes delanteros un poco chuecos y la nariz algo ganchuda con una línea muy delgada por labios. No estoy diciendo que soy más bonita que ella, pero…

Sueños MalditosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora