CAPITULO 4 (Ayúdame y te diré mi nombre)
-¡Hablas en serio!, no puedo verlo a la cara- decía mientras se frotaba los ojos con las manos, tratando de no regar la sopa que tenía en su regazo -le decía ¿que?- suspiro mirando a Soobin -no creo... que sobreviva- bufo Soobin -me van a sacar de las barracas... volveré a mi casa... Soy la vergüenza de mi familia- siguió quejándose, mientras Soobin volteaba sus ojos ya cansado de escuchar como Tae se avergonzaba más.
-Ya deja de quejarte y levántate, tenemos que entrenar-
Entre sollozos y quejas llegaron a el coliseo, al verlos llegar, todos sus compañeros, los aprendices, se acercaron rápidamente a saludarlo, a darle la bienvenida, entre charlas, contaban lo que hizo el General con la Omega, el no daba crédito a lo que escuchaba, la pelea fue narrada con detalle y él solo abría los ojos y la boca en asombro. Tae en verdad admiraba a el General JungHyun, soñaba con ser tan valiente, tan lleno de coraje, tan alto, tan lobo alfa, realmente lo admiraba, tanto como se admira un padre, así de importante era la imagen del General JungHyun, tanto que en sus anhelos, deseaba ser un alfa de verdad, no un omega.
El día que tanto temía se acercaba, su lobo estaba listo para salir, debía manifestarse, para poder subir de rango, ¿pero cómo podría esconder que es un omega?, ¿Como lograra obtener su nuevo poder y peaje sin salir del ejército, por ser un omega?.
Busco cerca del río las mismas cuevas donde estuvo bajo las cadenas de la omega Jisso, encontró una caverna, fría pero perfecta para manifestar su lobo y recibir la gracia de la Diosa Luna. Lo que esperaba, no era nada con lo que realmente su cuerpo y mente recibiría, su hermano le había dicho, que mientras los rayos de la luna tocan su cuerpo, el lobo sale de su cuerpo, sus huesos se tuercen, truenan, se fracturan y vuelven a soldarse, su piel se estira y empieza a picar, acondicionado se para que millones de pelos salgan por cada poro, sus orejas se vuelven puntiagudas y sus ojos atisban el azul celestial, dignos de su casta. Realmente no es algo para lo que esté preparado, sin embargo ha llevado todo lo necesario para lograrlo.
<Este es el último viaje> Pensó mientras terminaba de empacar su mochila.
-Vante, ¿a dónde vas?- preguntó un curioso Soobin.
-Debo ir a la aldea de los humanos por unas hierbas- contestó seco -no demorare sino unos días, prometo volver después de la luna llena- levantó la mirada esperando que no preguntara más.
-Esta bien, tráeme galletas de mantequilla y unos caquis secos- afirmó con la cabeza, mientras se levantaba para salir de las barracas -cuídate, Vante- sin más salió y caminó entre las carpas, encontrándose con Kay en la puerta, él también salió del campamento, partía a pasar tiempo con su madre, caminaron juntos gran parte del camino, entre charlas se contaron de todo un poco, Tae cree que llegó a conocerlo un poco más.
-¿A dónde vas?- Kay preguntó, sin realmente querer saberlo, solo por mero formalismo- ya casi estamos en el cruce de la frontera, debemos tener cuidado con los lobos pardos- miraba a todos lados, como si estuviera vigilando -dicen que se ha acercado a esta zona y han atacado a los viajeros, son sádicos Vante- continuo con algo que se cruzaba en su garganta, no se distinguía si era miedo o precaución.
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DIRAC Nos convertimos en una sola alma, única
FantasySi dos almas interaccionan entre ellas por un tiempo determinado y luego son separadas, ambas se pueden describir como seres distintos pero de una forma sutil se convierten en una sola alma, única. Lo que le ocurre a uno le sigue afectando al otro...