Capitulo 5

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[8 de febrero del 2006]

Escuché sonar el despertador que claramente yo no había programado así que lo apague y seguí durmiendo hasta que alguien entró a mi habitación.

—Buenos días señorita Aiko —Dijo Milán la empleada de servicio, abriendo las cortinas de mi enorme habitación -Es hora de que se levante y baje a desayunar-

—Cinco minutos más por favor —Me cubrí la cabeza con las cobijas —Quisiera acceder Pero fueron órdenes de su padre; el quiere compartir el dia con usted señorita Aiko.

Accedí a levantarme aunque por dentro estaba renegando.

<Maldita sea odio levantarme temprano... Maldito sea todo el mundo, mejor dicho ¡¡MALDITA SEA LA VIDA!!>

Me levanté adormilada y me dirigí al baño para lavarme los dientes, en eso llega Yukito tocando la puerta del baño.

—Kio ¿Ya casi bajas? Es que papá planeo una lista de lo que iba a hacer hoy contigo y dice que no quiere desaprovechar el día —Yukito entro al baño y se percato que estaba que me caía del sueño.

—¿Eh? Ah... Sí... Si, ¡Ahh! Lo que tú digas —Bostece mandando una mano a mi boca y tratando de tener los ojos abiertos.

Yukito me miró incrédulo —¿Okey?... Baja rápido —Yu salió del baño y yo me lave la cara para ya no estar tan dormida.

—¡Buenos días! —Baje al primer piso y saludé a papá.

<Estoy que me caigo del sueño que tengo>

—¡Buenos días Aiko! ¿Cómo dormiste? —Me dió una sonrisa mientras tomaba una taza de café —Bien, sin embargo en esa habitación hace mucho calor.

—Eso no es problema, lo arreglaré en un momento —Exclamo aún con su sonrisa mientras me señalaba la silla para que me sentará al lado de el.

—Estuve pensando en lo que podríamos hacer hoy y se me ocurrieron unas ideas que podrían ser de tu agrado —Tomo una taza de café.

—¿En serio? ¿Cómo que?

Tomé una tostada de la mesa y la introduje a mi boca. —Podemos ir a jugar paintball y luego ir a comer tu postre favorito.

—Me gusta la idea, pero que quede en claro que soy experta jugando paintball.

Esbocé una sonrisa mientras vienen flasbacks a mi cabeza de las veces que le gane a Wakasa.

—Ay querida, no has visto a tu padre apuntando con un arma jaja. —Me miro de manera retórica mientras tomaba café e igualmente yo le devolví la mirada.

—¿Quien quiere huevitos? —Yukito calmo el ambiente tenso y yo comencé a reír por lo impredecible que fue su pregunta.

—Yo quiero. —Levante mi mano mientras puse una sonrisa.

Después de un rato subí a la habitación, me di un largo baño y me puse una falda short de cuero color negro con un crop top de mangas color vainilla.

Me trence el cabello y baje al primer piso donde Yoshida ya me estaba esperando.

<Tengo un presentimiento extraño... 'Gire la cabeza a los lados' Ay dios Aiko en qué estás pensando>

—Ya estoy lista. —Cuando Yoshida me miró quedó boquiabierto. —Siento que tuve un deja vu, te pareces mucho a tu madre. Te ves hermosa.

—Gracias.

Le di una sonrisa para luego tomar su mano y dirigirnos al auto.

El camino hacia el campo de paintball se sintió extraño, no estaba acostumbrada a tratar con Yoshida, digo mi padre. A duras penas tocamos tema de conversación; al final me termine quedando dormida hasta que llegamos.

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