Emma¿Weasley?

7 año

Hogwarts ya no es para cualquiera, y ahora solo los más valientes estaban aquí en este tren, nadie se atrevía a mirarnos, todos nos tenían miedo y preferían hacerse aún lado, a pesar de que me gustaba la situación la disfrutaría mejor si no significara que yo y Tom estuviéramos heridos.

Sentada junto a Malfoy y Tom junto a Pansy los asquerosos mortifagos detuvieron el tren en una inspección, nadie preguntaba nada, todos sabían lo que sucedía. En el haciendo de atrás estaba Daphne, Astoria, Matteo, Blaise y Arion que de vez en cuando se escuchaban sus risas.

El camino no me pareció tan largo, la mayoría me la pasé dormida, mi magia se fortalecía cada día y lo demostraba al por fin dejar de desmayarme o dormir cuando se agotaba, mis heridas se curaron rápidamente y las cicatrices desvanecieron, o al menos la mayoría.

Ahora con mi padre como director, maestros mortifagos y los alumnos atemorizados mínimamente podría relajarme en todo respecto a Hogwarts.

No sé cuantos días estuvieron torturando a Tom y tampoco quería saberlo pero lo haría beber una poción para descartar cualquier cosa.

Malfoy no me a soltado la mano en ningún momento, sabia que no le gustaba decirme lo mucho que le estaba afectando todo, pero escuché como lloraba por la noche a mi lado mientras me tomaba de la mano simplemente me partió en corazón.

Ya lo único que me importa es tener un futuro feliz, a su lado, todo lo demás se fue a segundo plano al descubrir que mi vida sin él no importaba demasiado, y en realidad no sabía si esto estaba mentalmente bien, pero no me importaba, las cosas son así y ahora ambos dependemos el uno del otro. 

Miraba a Malfoy morirse de sueño mientras caminábamos pero había evitado dormirse para seguir tocando mi mano brindándome seguridad.

Yo estaba locamente enamorada, enamorada de su actitud, de sus hermosos ojos grises, de su dulce sonrisa, de su encantadora voz, hasta de las letras de su nombre, sé que no es perfecto, que me hace enojar y dice estupideces pero es la persona que más amo en el mundo y donde quiera que nos lleve el destino quiero que vayamos de la mano siempre

-Te amo Rubio- le dije apretándole la mano

-Yo más Pelirroja- me dijo besándome rápidamente