𝗠𝘆 𝗳𝗮𝘃𝗼𝗿𝗶𝘁𝗲 𝘀𝗽𝗮𝗻𝗶𝘀𝗵 𝗴𝗶𝗿𝗹| "jamás creí que alguien pudiera quererme tanto"
Valeria es la mejor amiga de Plex.
Adrián su editor y compañero de casa.
Ambos con mucho en común, pero un pasado bastante turbulento.
¿Qué podría salir m...
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『∞』
📌 – Sri Lanka
REAL LIFE • Valeria
—Madre mía, Adri. No te cortas nunca las uñas y hoy le pides a Valeria que te las corte cuando llegamos tarde al aeropuerto —se quejó mi hermano.
—Se lo pido siempre, bro.
—Voy a empezar a cobrarle —bromeé mientras Dani nos grababa—. Ya está, como nuevo.
—Madre mía, se ponen ahora con la manicura. No es hora de trabajar, Valeria —se volvió a quejar mi hermano.
Hasta hacía un año más o menos trabajaba en una empresa de estética en una de las tiendas estéticas más grandes de Barcelona.
—Por bocazas a partir de ahora voy a empezar a cobraros cualquier servicio estético.
—Ya la has liado —se quejó Adri antes de salir del baño, haciéndonos reír.
Resulta que Buddik, nuestro guía en Sri Lanka, se había quedado dormido, así que cuando llegó tuvimos que subir las maletas lo más rápido posible al coche y prácticamente ser un personaje de fast and furious.
Básicamente había dos opciones, o llegábamos al vuelo de las nueve y media para Dubái o, si lo perdíamos, nos íbamos a Singapur.
Tuvimos que correr, pero, gracias a Dios, conseguimos llegar a la puerta de embarque a tiempo.
La importancia que había para llegar a Dubai, era que teníamos una sorpresa para Jopa y, es que gracias a mis queridísimos contactos, habíamos conseguido poder quedar con Ilia Topuria, persona a la que él admiraba mucho.
Además de que era el cumpleaños de nuestro amigo Paco y nos apetecía verle.
—Chicos, se vino el prime —avisó Plex a cámara antes de que él, Borja y yo nos sentásemos en el business.
Borja lo había ganado mientras Adri y yo estábamos en el masaje, pero necesitaba dormir con urgencia, así que yo le pagué a Plex mi viaje para poder ir con ellos en la lujuria absoluta.
Los tres brindamos una copa de champán y le dimos un trago antes de que mi hermano pusiera una mueca, haciéndome reír.
—Toma, toma —me ofreció la copa asqueado, así que acabé yo bebiéndome ambas bebidas.
—Para que digas que no cumplo mi palabra.
—Cumples, cumples —le aseguró Borja con una sonrisa—. Mi primer business.
