Capitulo 27

2.9K 318 40
                                    

- ¿Es-Está viva?

Escuché vagamente la voz de Olivia, para después oír a Nam y Mille entrando al callejón, gritando mi nombre. Todo se volvió demasiado confuso para ese punto, era yo tratando de controlarme, calmar a mi omega interna que me pedía ponernos a llorar al ver el cuerpo de Nita en el suelo, con los restos de lo que fue un ladrillo cerca de su cabeza.

No lo pensé, no lo planeé ni mucho menos imaginé que terminaría de ese modo. Cuando giré para entrar al callejón, Nita me daba la espalda mientras golpeaba a Olivia, quien estaba tirada en el suelo hecha un ovillo, cubriéndose el rostro y el estómago. La rabia que sentí fue suficiente para que observara a mis lados, encontrándome con unos ladrillos viejos y abandonados apilados unos sobre otros. Tomé el que estuvo más cerca y corrí hacía ella. Para el segundo en que los ojos de Olivia me miraron, ya el cuerpo de Nita caía al suelo en cámara lenta, junto con el ladrillo roto.

- Demonios, Freen. - Nam me tomó del brazo, sacudiéndome ligeramente. - Amiga, dime que estás bien, por favor. Mírame.

Salí del trance en el que me encontraba cuando su cuerpo rodeó el mío y me abrazó con fuerza. Sentí su calidez y fue suficiente para aferrarme a la frágil espalda de mi amiga, dejando que mi omega fuera libre, que mi cuerpo temblara y que mis ojos se llenaran de lágrimas contenidas, mientras le repetía a Nam que quería a Samantha.

- Llámala, ¿sí? Llámala, ella puede ayudar.

Recordé que Rebecca tenía una reunión y seguramente en este momento debía estar en ella, pero mi egoísta deseo pudo más, así que apenas un brazo de Nam me liberó, saqué mi teléfono de mi bolsillo y marqué al segundo número en llamadas rápidas. Pegué el aparato a mi oreja y al segundo timbre, escuché la voz de mi alfa, llenándome de una sensación de paz impresionante.

"Hey, babe. ¿Qué pasa?" - Preguntó, preocupada. -"Ahora deberías estar en clases."

- Lo siento. - Gemí, tratando de aclarar mi garganta. - Lo-Lo siento Becky, es que... Necesitaba-Necesito escucharte.

"¿Freen?" - Su voz se escuchó mucho más alarmada. -"Cariño, ¿qué ocurre? ¿Por qué lloras?"

- Mierda. - Llevé una de mis manos a mis cabellos y contuve la respiración por unos segundos, tirando de mis cabellos con algo de fuerza. - Es que... Ella, fue ella, ella empezó a golpear a una omega y no pude... Mierda, Rebecca, no pensé-Bueno, sí pensé, pero... Creí que no debía...

"Permitirlo."

- Ujum. - Suspiré, apoyándome en la pared que estaba a mi espalda y observando a Millie auxiliar a Olivia. - No debía... Permitirlo.

"¿Te hizo algo? ¿Cómo estás?"

- No, no. - Negué con la cabeza, aunque Rebecca no podía verme. - Ella ni siquiera me vio, sólo... Sólo la golpeé con un ladrillo que encontré, la golpeé en la cabeza y ahora está... Está en el suelo. Demonios, Rebecca. - Me dejé caer hasta que me senté en el piso, apoyada aún contra la pared. - Dime... Dime que todo estará bien. Vamos, dímelo.

"Todo está bien, babe." - Asentí, pasando mi brazo por mis ojos para eliminar los rastros de lágrimas. -"Me pone más tranquila que no te haya visto, sabes cómo son los alfa, seguramente luego buscaría venganza y yo no iba a permitir que te tocara ni un milímetro. Ni a ti, ni a Noah."

- Lo sé. - Sonreí, mientras le regalaba un gesto de agradecimiento a Nam. - Eres mi increíble alfa.

"Y tú mi perfecta omega, Freen. Estoy orgullosa de ti."

- Pero... Becky... Tenemos miedo de tocarla. Todas, creo. - Las tres presentes me miraron, confirmando mi teoría. - No sé si respira.

"¿Quieres que vaya?"

The Perfect Omega Beckfreen (G!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora