—Lo siento, ¿te estoy aburriendo? Puedes subir si quieres, no me molesta.— La pregunta que Nikola le hace a Eva la extraña mucho, ya que ella estaba poniendo atención a lo que el chico le decía. Por eso, cuando le pregunta eso, no puede evitar preocuparse.
—No, no, ¡jamás!— Exclama ella, —¿Por qué preguntas eso? Yo estoy prestándote atención.— lo que dice es verdad, estaba muy atenta hasta ahora.
Nikola la mira con duda durante unos segundos. Luego susurra algunas cosas que Eva no entiende, y, finalmente, mira a su madre con una expresión un tanto triste.
Si Eva ya estaba preocupada ahora está aún peor, ya que nunca había visto a Tesla con tal expresión en su cara, y sobre todo después de hablar de ciencia y hacer experimentos. La rubia sabe que alguien le ha dicho algo negativo a su hijo, y en cuanto sepa algo le pegará una paliza al culpable.
—¿Nikola? ¿Estás bien, cariño?— Pregunta, a lo que su hijo solo sacude su cabeza y se sienta a su lado. Están en silencio durante un minuto, en el que Eva abraza a su hijo y pone su cabeza en su pecho.
—La gente suele ignorarme poco después de hablar...— Responde Nikola, sorprendiendo un poco a su madre. —Mis amigos me dijeron que debería dejar de hablar tanto, que soy pesado y que a nadie le interesa lo que tenga que decir.— Termina de hablar, sin notar las lágrimas que salen de sus ojos. En cambio, Eva sí las nota y las quita de su cara con su dedo.
—Pues tus amigos son unos inútiles.— Dice con total honestidad. —No saben apreciar lo que tienen, ya se enterarán de lo que es bueno.— Abraza aún más fuerte a Nikola, que llora un poco más. —Ni se te ocurra llorar por ellos, son unos patanes, y no merecen ni una sola lágrima tuya.—
Se abrazan en silencio, con el castaño aún llorando.
—Entonces... ¿De verdad no te aburro?— Le pregunta Nikola a su madre. Ella, mirándolo con tristeza, niega con la cabeza. —Lo que me estabas enseñando era muy interesante, ¿cómo lo has aprendido?— Le pregunta a su hijo, sonriendo.
—Me lo enseñó Dane.— Responde el chico, recordando los momentos con su hermano. —Cuando era pequeño me enseñaba de todo, mi pasión por la ciencia se la debo a él.— Dice, con una sonrisa nostálgica en su cara.
Eva no sabe todos los detalles sobre su hermano, ya que su hijo solo le ha contado su nombre y algún que otro momento que tuvo con él. Ella sabe que falleció cuando Nikola cumplió 9 años, y lo mucho que se querían.
—Tu hermano suena como una gran persona.— Acaricia la cabeza de su hijo mientras habla, haciendo que cierre sus ojos. —Lo era, siempre me sacaba de los problemas que tenía y me contaba muchas cosas curiosas...— Lágrimas se vuelven a presentar en los ojos de Nikola, quien parece que quiere decir más.
—¿Y por qué se fue?— Pregunta Eva, sin parar de acariciar los cabellos de su hijo. Él deja de sonreír, y una expresión desagradable se apodera de su rostro. —No tienes que decir nada si no quieres, solo tengo curiosidad...— La mujer completa su oración, no queriendo presionar al chico que se encuentra en sus brazos.
—Dane era alguien increíble, pero en cuanto cumplió los dieciocho años mis padres lo echaron de casa.— Empieza a relatar, sin separarse en ningún momento de su madre, —Una de las veces que fui a visitarlo simplemente estaba tumbado en el suelo, cubierto de sangre y con una nota a su lado...— Su voz se vuelve temblorosa y su respiración se acelera un poco.
Eva decide que lo mejor que puede hacer es calmar a su hijo. Lo acerca aún más a su cuerpo y le dice que cuente hasta diez y respire profundamente. Cuando Nikola lo hace se nota más tranquilo, así que sigue con su historia.
—La nota decía algo como 'para mi hermano Nikola, nunca pienses que esto ha sido tu culpa. Recoge tus cosas y huye de casa, por favor, no puedo soportar pensar lo que esos dos te puedan estar haciendo. Te amo y siempre te amaré, hermanito, nunca lo olvides.'— Respira hondo y sigue hablando —Lo que vi ese día... sé que nunca lo podré olvidar, pero al menos no me culpo. Dane solía decirme que todos avanzamos, ya sea rápido o lento.—
Eva abraza a su hijo con mucho cariño y le da varios besos en su cabellera, calmándolo un poco. La puerta del sótano en el que estaban hablando se abre, y Kojiro baja con dos platos de comida en las manos.
—Nosotros acabamos de comer, os estábamos llamando pero parece que no nos escuchabais.— Dice, dejando un plato en frente de cada uno. De su bolsillo saca un paquete de pañuelos, un par de servilletas y dos tenedores, dejándolo al lado de los platos. —Espero que os guste, la hemos hecho entre Okita y yo.—
El pelinegro sube y vuelve a cerrar la puerta, dándoles privacidad. Eva sonríe, pincha un poco de comida y la introduce en su boca, diciendo lo deliciosa que está.
Mientras comen ella le cuenta sucesos aleatorios de su vida a su hijo, que solo escucha con una sonrisa en su cara, que está roja de las lágrimas.
Cuando terminan de comer, Eva le da un último beso en la mejilla a Nikola antes de hacerlo subir con ella a su habitación.
Ella esperó fuera de su habitación a que se cambiara, y cuando le dijo que ya había terminado, entró para acurrucarlo en su cama.
—Pero son las tres de la tarde, no pued-— Se queja el científico antes de ser interrumpido por su madre. —Bueno, pues una siesta, que te va a hacer bien.— Lo obliga ella, dándole un beso en la frente y cerrando la persiana.
Antes de salir de la habitación, comprueba que Nikola esté más o menos dormido, y cuando ve que es así simplemente sale, cerrando la puerta.
—No vas a poder levantarlo después, lo sabes, ¿verdad?— Le pregunta Simo a su madre, que solo asiente.
ESTÁS LEYENDO
✶﹑¡𝐌𝐀𝐌𝐈 𝐄𝐕𝐀! | SNV
Fanfiction"¡𝐌𝐀𝐌𝐈 𝐄𝐕𝐀!" - Una serie de capítulos siguiendo a Eva, que ayuda a sus hijos (los Einherjar) con lo que puede. ᯓ ᡣ𐭩 AU moderno, algunas historias han sido alteradas para encajar bien con este universo. ᯓ ᡣ𐭩 Escrito por @oraochaa (2024) ᯓ ᡣ�...