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12 CHICOS LOBOS - Capítulo 20

Capitulo 20

Aún tenía la mano de Nick sobre la boca cuando se giró bruscamente para abrazarlo. Hundió su cara sobre su sudadera, inhalando fuertemente su aroma, grabándolo en su memoria. Apenas en ese momento, cayó en cuenta lo mucho que lo había extrañado.

- Nick... - susurró contra su pecho.

- Hola Ángel.

Él le devolvió el abrazo, un abrazo firme y genuino. Dios, como había extrañado esos abrazos.

- ¿Dónde has estado? ¿Te encuentras bien? ¿Por qué tardaste tanto en volver a buscarme? – necesitaba todas esas respuestas para sentirse tranquila.

- Tú... ¿Te preocupaste por mí? – una sonrisa arrogante pero fascinada se asomó por su boca.

- ¡Claro que me preocupe! No sabía nada de ti, y tus hermanos no son muy cooperativos que digamos.

La expresión de Nick se torció en una pequeña mueca pero regreso a su estado original rápidamente. Se separó de Erika y le aparto algunos mechones de la cara, para después besar su frente.

- Perdóname Ángel, nunca fue mi intención preocuparte.

- Pero ¿Dónde estabas? ¿Qué fue lo que pasó? – lo miró expectante de su versión.

- Estaba algo ocupado.

- Lo sé, eso es lo que me dijo Seth, pero él se comportó tan... extraño. ¿Qué fue lo que tenías que hacer?

- Cosas.

- ¿Qué cosas? – insistió.

Nick se alejó un poco y miro a su alrededor, evitando la pregunta de Erika. ¿Por qué se mostraba tan vacilante? ¿Tan difícil era dar una explicación real y fundamentada?

- ¿Es un secreto? – preguntó tranquilamente, tratando de quitarle importancia al asunto, para lograr que le explicara.

- No es algo de lo que esté muy orgulloso. – admitió – pero es algo que debo hacer.

- Supongo que no puedes decirme de que se trata.

- Prefiero que no lo sepas Ángel, lo siento.

Se acercó para abrazar a Erika, pero ella retrocedió un poco, impidiéndole que lo hiciera.

- Solo quiero que sepas que, yo te quiero, y te acepto tal y como eres, no juzgaría ninguna de tus acciones. Cometer errores es parte de la vida, Nick. Y créeme que no me afecta en lo absoluto aceptar los tuyos.

Los ojos de Nick parecieron entristecerse, mientras su boca formaba una media y triste sonrisa. De pronto, el chico le dio la espalda y comenzó a restregarse la cara y el cabello con frustración. Su comportamiento era definitivamente algo nuevo para Erika. Parecía enojado. Jamás lo había visto así.

- ¿Te encuentras bien? – preguntó acercándose para tocarle el hombro.

Antes de que llegara a tocarlo, Nick se giró bruscamente. Tenía los ojos algo enrojecidos por contener las lágrimas, pero parecía haber recuperado la tranquilidad.

- Estoy bien, es solo que, eres demasiado buena para mí, Ángel, incluso más de lo que pensaba. – repuso en un tono calmado.

Nick se acercó y la abrazó, estrechándola nuevamente en sus brazos. Recargando su mejilla en la parte superior de la cabeza de Erika. Se quedaron así, en un hermoso silencio, hablando a través de sus pausadas respiraciones.