Capítulo 9

1.8K 227 30
                                    


Día de la separación.

Un chico de veinte años almorzaba con sus padres tranquilamente, ese día su clase había sido cancelada y llegó a casa temprano.

Tenían una excelente comunicación, se sentía en total confianza en hablar con ellos de lo que sea, sus padres le daban la libertad para hacerlo. Desde que su hermano mayor murió, se hicieron más unidos de lo que ya eran.

Desde que su mejor amigo le había contado que su tío lo enviaría a trabajar al sanatorio del pueblo, la idea de irse con él rondaba en su cabeza, así que decidió contarle a sus padres y saber su opinión.

—¿Estás seguro que eso es lo que quieres? —Preguntó la señora Kim dulcemente— Sabes que puedes entrar a trabajar en el hospital de la ciudad.

—No quiero dejar solo a Hoseok, mamá —Dijo triste— Él ha sido mi mejor amigo desde que tengo memoria. Además, yo soy su único apoyo, saben cómo es la situación con su tío.

—Por eso odio a esos religiosos que aparentan ser una cosa y son el demonio puro —Expuso el señor Kim con amargura— Ese hombre maltrata a su sobrino pero lo ves en la iglesia de santurron.

—Yo también lo detesto —Concordó la señora Kim.

—¿Entonces, si puedo? —Preguntó Seokjin.

—Jin, sabes que te apoyamos en todo lo que decidas —Dijo su padre dándole un suave apretón en la mano por encima de la mesa— También queremos saber cuándo te vas a declarar ¡Hombre, te lo pueden quitar!.

—¡Papá! —Chilló Jin, muy avergonzado y sonrojado, su padre siempre jugaba con eso —¡A mi no me gusta Hobi!.

—Y yo soy virgen —Dijo su madre, levantándose de la mesa riendo a carcajadas.

—¡Mamá!.

—Sabes que te apoyamos, hijo —Habló su padre, un poco más serio— No nos importa si te gusta un hombre o una mujer, lo importante es tu felicidad. Queremos que seas el hombre más feliz del mundo, nunca te juzgaremos por eso.

—Papá, él sólo me quiere como un amigo, Hobi nunca se fijaría en mi —Bajó su mirada— Es mejor dejar las cosas como están, no quiero perder su amistad.

—¿Eso crees? Porque lo he visto como te mira, y no miras así a tu amigo.

—Estás imaginando cosas, papá.

—Te acordarás de mí, Seokjin.

Su padre le dió un pequeño beso en la frente y salió de la cocina.

Seokjin quedó algo pensativo. Si, era cierto que tenía casi toda su vida enamorado de Hoseok, pero nunca se atrevería a decírselo, arruinaría su amistad por completo. Tampoco quería ocasionarle más problemas con su tío, lo mataría si supiera que su sobrino está saliendo con otro hombre.

Por el momento era mejor guardar silencio.

Hoseok se encontraba en su habitación curando su labio roto, había peleado con su tío nuevamente por el asunto de trabajar en el sanatorio y lo había golpeado, otra vez. Él no quería trabajar en ese lugar tan horrendo, mucho menos sabiendo que casi todos los días mataban a chicos y chicas sólo por no cambiar su orientación sexual. Era espantoso.

Pecado/ Kookmin⁴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora