Show me where I belong (Minsung)

Capitulo 13: Océano Ondulante

Warnings: Relación abusiva.

Cuando regresaron, había luz en el apartamento. Hyunjin se puso de pie cuando los escuchó venir, con los ojos llenos de preocupación. Minho no sabía si Félix le había enviado un mensaje de texto o no, pero supuso que el simple hecho de verlos causaría preocupación. Minho estaba apoyando a Jisung, quien lloraba como si el mundo se derrumbara a su alrededor; probablemente así lo sentía de todos modos. Minho estaba seguro de que se veía tan feliz como una nube de lluvia, si esa nube se hubiera vuelto completamente negra y no solo tuviera lluvia sino también relámpagos.

—¿Debería llamar a alguien? — Preguntó Hyunjin, claramente lejos de sentirse cómodo en este tipo de situaciones —¿A Chan tal vez?

Félix miró a los otros dos antes de sacudir la cabeza y agarrar la mano de Hyunjin. Lo llevó consigo a la cocina, pero Minho estaba seguro de que ambos estaban escuchando y lanzando miradas hacia ellos.

Aunque eso ya no le importaba. Tenía en sus brazos a otro ser humano que se estaba desmoronando. Las piernas de Jisung parecían haberse debilitado y Minho estaba seguro de que, si lo soltaba, el cuerpo caería sin fuerzas al suelo.

Intentó mirarlo a la cara, pero la cabeza de Jisung estaba colgando, sólo la corona de su cabeza era visible. El cabello color caramelo estaba alborotado y olía a sudor. Minho intentó doblar el cuello para vislumbrar su rostro que estaba presionado contra su pecho. El movimiento pareció provocar una reacción en Jisung. Levantó la cara y sus ojos finalmente se encontraron, Minho sintió una bocanada de aire salir de sus labios mientras el universo en los ojos de Jisung se rompía en pedazos como si fueran vidrios rotos. Por primera vez, se derrumbó por completo, arrojándose aún más cerca de Minho y envolviendo su único brazo bueno alrededor de Minho como si fuera lo único que pudiera salvarlo de ahogarse. Su llanto resonó en el apartamento, lloró tanto que casi pasó como un grito. Las lágrimas los empaparon a ambos y Minho de repente comprendió por qué tenía que agarrarse a él para no ahogarse. Se sentía como si todo el océano pudiera derrumbarse a su alrededor y no sería nada comparado con esto.

Minho no pudo hacer otra cosa que abrazarlo. Trató de calmarlo con las mismas voces suaves que usaría con sus gatos si estuvieran asustados, y con caricias en su espalda temblorosa. Era una buena distracción para tratar de controlar sus propios temblores. Sin embargo, todavía parecía difícil. Su ira lo consumía y su miedo lo comía vivo.

Intentó cerrar los ojos y ocultar su rostro del mundo malvado en el cabello de Jisung, pero Jisung se estaba cayendo de su abrazo, como si sus piernas realmente se hubieran rendido. Minho tuvo que usar todas sus fuerzas para sostener el débil cuerpo, sin embargo, en algún momento se dio por vencido. Tratando de no lastimar el brazo de Jisung u otras lesiones ocultas, levantó sus piernas y lo llevó al estilo nupcial por la sala de estar. Jisung era muy ligero y se acurrucó sobre sí mismo cuando sintió el cuerpo de Minho sosteniéndolo. Parte de la ira se desvaneció del cuerpo de Minho y fue reemplazada por más tristeza, tristeza de que una criatura tan dulce pasara por tanto dolor.

Cuando llegó al sofá lo bajó con delicadeza, sintiendo que estaba manejando un muñeco de porcelana que podía romperse en cualquier momento.

Soonie ya estaba acostado allí y apenas levantó la vista mientras colocaba al niño a su lado. Minho esperaba que el gato se quedara allí, ofreciéndole algo de consuelo. La mano de Jisung encontró instintivamente el suave pelaje cuando Minho lo soltó, su llanto se había ahogado hasta convertirse en un doloroso hipo.

Minho se sentó vacilante en el otro extremo del sofá, por alguna razón necesitaba el espacio. Se sentía abrumado y lo necesitaba para mantenerse fuerte por Jisung.

Miró al gato que dormía plácidamente disfrutando de las caricias de Jisung a pesar de que este estaba tembloroso. Su otro brazo todavía estaba presionado contra su pecho.