✯ Desperté y la leyenda dejó de ser una epifanía para envolverme en las alas de su verdad ❜
ⓘ 𝘴𝘪𝘯𝘰𝘱𝘴𝘪𝘴 𝘦𝘯 𝘦𝘭 𝘪𝘯𝘵𝘦𝘳𝘪𝘰𝘳
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𝗵𝘁𝘁𝗽𝘀//𝗮𝗯𝗼𝘂𝘁𝘁𝗵𝗶𝘀𝘀𝘁𝗼𝗿𝘆. . .
portada & historia por mí...
no tengo que actuar, soy etérea podría ganar una pelea en mi período de hecho, ahora mismo podría construir una pirámide. te metiste con mi ciclo lunar, eso es peligroso.
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Era una noche templada. Normal. Corriente. No había nada de especial en ella. Merlía ni siquiera sintió interés por la Luna Llena alzándose entre las nubes.
Huyó del encargo de recibir a los invitados tan pronto como pudo.
—Emma. —graznó. —¿Para qué rayos me dices "Si quieres que algo se haga bien hazlo tú mismo", si después me vas a mandar a mí a hacer las cosas? —Merlía tenía las mejillas encendidas y el ceño fruncido.
Emma le dió una sonrisa inocente.
—Perdón.
La castaña puso los ojos en blanco.
Mucho perdón y todo pero los quince minutos que llevaba recibiendo gente en la puerta ¿quién se los devolvería? A modo de insta-karma le robó una de las magdalenas a la charola que portaba Emma.
Siguió su camino disfrutando del dulce y dejando a la rubia sola en la cocina.
Regresó al salón situándose junto a Cleo y Rikki.
—Me gusta mucho tu vestido. —elogió Cleo dándole una media sonrisa.
—¡Gracias! —Merlía sonrió contenta. —Es de Serena.
Cleo hizo una mueca.
—Que suerte tienes de llevarte bien con tu hermana. Kim solo me roba la ropa y es insoportable conmigo. —se quejó.
Merlía, por lo general, amaba a los niños. Siempre tenía algo bueno que decir de ellos. Ahora mismo se le pasó por la cabeza responderle a Cleo con un "Oh, pero seguro que en el fondo te quiere y te admira como su hermana mayor" o tal vez "Solo es una niña, cuando crezca serán más cercanas". Pero Kim era, probablemente, la única niña en toda la Costa Dorada a la que Lía no entendía ni soportaba. Pero era demasiado cruel admitir en voz alta que odias a un niño, así que mejor no le dijo nada.
