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Xiao Zhan buscaba una sombra donde comer su desayuno, su mami le ponía su caja de almuerzo llena de cosas deliciosas, habían ido a las montañas para una excursión escolar, se hospedaron en un hotelito modesto internado en las heladas montañas de Gusu, así que el solía pasear por los alrededores buscando un lugar donde estar a solas, le gustaba hablar consigo mismo y rodearse de la vegetación de los alrededores, esa era su rutina desde que llegaron ahí.
Pero esta mañana había tomado un camino diferente, llegó hasta un claro en el bosque donde muchas criaturas tenían sus madrigueras, ahí estaba su príncipe azul, un joven apuesto, callado, cargaba un lindo conejito blanco sobre su hombro que parecía encantado de estar sobre aquel apuesto chico, sintió un poco de envidia de ver aquello, el también quería estar en esos brazos, que lo arrullaran de esa manera tan tierna...
Iba a acercarse al joven cuando alguien lo tomó de la mano para regresarlo a su cabaña, ese día Zhan fue castigado por invadir la zona restringida de la montaña, esa parte de la zona era propiedad de los Wang, tenían una casa por ahí y en ocasiones venían a pasar unos días para descanzar de su agitada vida en la ciudad, después de ese encuentro Zhan se obsesiono con buscar todo tipo de información sobre la familia de su príncipe.
Se esmero en formar parte del círculo interno de las amistades del joven y su familia, hasta que logró que a los 18 años, su príncipe Wang Yibo le enviará a sus padres una carta de compromiso, después de muchos años perseverando había logrado su objetivo, ser la esposa de su presiado príncipe, desde ese día sus días eran dichosos.
Quedo en cinta de su esposo en la noche de bodas que bueno no fue como la había soñado, pero su madre le dijo que no todo en la vida era color de rosa, que tenía que ver el lado positivo, estaba preñado de su amor y era triple amor pues resultó ser un embarazo de trillizos, como regalo de nacimiento Zhan pidió a su esposo un jardín lleno de conejitos blancos, pero el solo respondió que era alérgico a esos animales llenos de pelos y suciedad.....
Pensó que le había mentido, será que algo le pasó a su príncipe ese día para que generará un trauma contra esos pequeños animalitos, bueno eso no era lo importante, lo único bueno de esta situación era que el era el esposo de Wang Yibo y seria la madre de tres hermosos bebés que serían la alegría de su hogar.....
