Terminaba de coser los últimos puntos para cortar con las tijeras y así ponerme de pie como podía,estirando la gran pancarta de bienvenida que había hecho para el amor de mi vida la cual esperaba con ansias a su llegada,mi adorada cadete Hange Zoé se había marchado llevándose conmigo el corazón quien prometía cuidarlo para llegar sana y a salvo conmigo.
—Esta hermoso ¿No lo crees, bebé? —acariciaba mi barriga de ya nueve meses de gestación,unas cuantas pataditas se hacían presentes —Nos gusto es lo bueno,verás que a mamá también le gustará.
Buscaba entre los cajones las serpentinas pero no les encontraba hasta dar con ellas en el segundo de arriba y más globos,bueno al menos tendría muchísimo con que decorar para que se viera bonito el hogar,estaba por colocar las serpentinas cuando un pequeño rubio llegaba hacia mi tomándolas.
—Pero....
—Lo haré por usted señora Zoé —falco llegaba arrebatandome la caja,si se había quedado con nosotras junto a la castaña Gaby.
—Ya te e dicho miles de veces,solo dime t/n —reia bajito— Gracias por ayudarme —peinaba sus cabellos.
—Por usted lo que sea¿Dónde los pongo? —se giraba hacia mi con ellas en mano.
Yo le señalaba los puntos altos pero sin dejar de cuidarlo poniendo una silla y tomando su delgado cuerpo evitando se cayera.
—Descuide puedo hacerlo solo,estoy grande además puede lastimarse —ni el se creía esas palabras.
—Solo déjame cerciorarme de que estarás bien,puedes sufrir un mal golpe.
—Pff,ese niñato no es más que un principito delicado —gaby llegaba hacia nosotros para ponerse a mi lado— Hola señora Zoé.
—Hola linda —me giraba a verle— Wow pero que tenemos aquí,luces hermosa —gaby se sonrosaba por mis cumplidos ante su vestimenta.
—Lo hizo la mejor costurera del mundo —tiraba de sus elásticos dando una vuelta tomandose de las mejillas— T/n Zoé.
Yo solo alzaba mi mano ante sus ahora cumplidos a mi.
—Que va lo dices porque te has encariñado conmigo ¿Verdad? —alzaba la ceja.
Ella desviaba su vista para ir hacia los globos.
—Le ayudaré con los globos usted puede sentarse y descansar —inflaba sus mejillas viéndose graciosa para luego tomar uno color azul.
—Gracias pero ya estuve mucho sentada —pasaba mis manos entre mis caderas intentando quitar el peso de mi vientre —Asi que les veré de cerquita así puedo auxiliarlos.
—Es muy testaruda —falco le decía a Gaby.
—Ni que lo digas, tanto que ni la teniente Hange quien tiene a su poder a miles de soldados y miedo por parte de ellos ni siquiera se atreve a decirlo no —se burlaban.
—¿Cómo se le dice a ello? —preguntaba el rubio.
—Gobernada —se carcajeaban los dos mientras seguían diciendo más acerca de mi hange.
Negaba con diversión mientras les apuntaba.
—Dejen a mi esposa en paz eh —les amenazaba— O les juro que no les daré del pastel que hice.
—PASTEL!!! —emocionados.
Después de un rato veíamos todo lo cual se veía tan hermoso y colorido como le gustaba a mi mujer ,ellos seguían viendo cuando llegaba para ofrecerles una bandeja con jugo y galletas.
—Su paga por ayudarme pequeños.
—Gracias —decian al unísono para luego comer.
—Son deliciosas,T/n —falco saboreaba casa mordisco.