〃Cualquiera se puede enamorar de un cantante pero, ¿un joven boxeador? Tal vez solo logre descifrar por que aquel cantante saco un álbum con una portada peculiar.
❝Eres un boxeador... ¿Y que? Quiero sentir esos labios.❞
〃 La portada es de mi autorí...
Con un poco de dificultad por la gran prensa que se hacía afuera del lugar, el cobalto y su manager pudieron entrar.
Les guiaron al lugar donde tomarían las fotografías y que en un momento le darían la ropa qué modelaría el cobalto.
Mientras el menor inspeccionaba el lugar noto la presencia de alguien que ya conocía, un chico atractivo, con ojos como rubís, tenía un increíble traje negro con toques dorados y rojos, se hacia notar sus piercings en sus dos orejas y el increíble pecho blanco y más abajo se hacia ver.
—oh dios mio... ¿Por que no me dijiste que el vendría?
—no lo sabía. —dijo sinceramente. —ve a hablarle o no lo se espera a que vengan con tu conjunto su representante está viniendo hacia aquí.
La hermosa mujer se acerco al albino, hablaron un poco y decidieron dejar a las dos chicos ahí mientras su sesión de fotos daba por iniciar
—lamentamos la tardanza pero aquí esta, puede ir a cambiarse. —se acerco una chica al cobalto y este agradeció mientras tomaba la ropa.
Despues de cambiarse, se acerco lentamente se acerco al set, era turno del azabache de tomar las fotos.
Vio cada pose, cada mirada cautivadora y no pudo evitar sentirse nervioso cuando inconscientemente este volteaba a verlo cuando el tenía sus ojos puestos en el.
Sus miradas se cruzaban y lo hacía ponerse más nervioso.
Llegó el turno del cobalto y trató de evitar el sentir que ese mismo azabache ahora era el que no quitaba su vista en el, se limitó a concentrarse y no voltear a verlo pero sentir su mirada lo estaba matando.
Cuando hubo un descanso el cobalto suspiro de alivio pero la presencia de aquel cantante lo hizo estremecer.
—hola. —saludo el azabache.
—hola... —contestó el cobalto.
—¿eres nuevo haciendo sesiones de fotos?
—si... Es mi primera vez... No suelo hacer este tipo de cosas por mis entrenamientos.
—ya veo... Espero que te acostumbres.
—gracias.
El azabache se marchó dejándolo solo y el cobalto noto lo educado y reservado que había sido, había sido una pequeña charla y ya estaba pensando más allá.
୭ ✧. ᵎᵎ 🎀
En toda la sesión ambos erizos no volvieron a dirigirse la palabra pero no por que no quisieran hablar si no que no sabían empezar una conversación.
Se limitaron a hacer su trabajo y al final se les pidió una foto de ambos para la portada de la nueva revista.
Cuando tomaron la foto de ambos, la miraron y aceptaron que esa era buena para la portada.
—vi tu combate. —hablo de la nada el azabache. —eres bueno en eso.
—¿viste mi... Combate? —dijo sorprendido.
—si, espero que la próxima puedas ganarla.
—esta asegurado.
El azabache soltó una pequeña risa al escuchar el comentario tan seguro del cobalto.
¡¿Lo hice reír!? ¡Lo hice reír! Pensó el cobalto.
—claro, bueno debo irme. —el azabache se despidió de una forma educada pero antes de irse el contrario volvió a hablar.
—¡vi tu performance!
—¿si?
—¡estuviste increíble! ¡Te veías tan atractivo...! —sintió su presión bajar al decir la última palabra. —digo, te veías bien osea no digo que no te veías atractivo o bueno... No pero si.
El azabache lo miro confundido y cuando vio al menor enredarse con sus propias palabras rio.
—lo entiendo, gracias. —le interrumpió.
El menor no pudo evitar sentirse idiota, mientras su corazón latía rápidamente y sentía ganas de que el suelo se lo comiera y lo escupiera en otra parte.
—okey... —termino por decir.
Noto como el azabache se iba con su manager y vio como silver se le acerco después de una larga charla.
—¿que tal te fue?
—hice una idiotez. —dijo decepcionado. —¡vámonos!
El cobalto camino a paso rápido para salir pronto de ahí, ir a su hogar y quedarse en cama mientras pensaba en la vergonzosa situación.
Había echado a perder su primera impresión y su mente se lo recordaría por lo menos toda la semana.
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