Lisa veía la hora dos de mañana, ve la mesa servida, sabía que la comida ya estaría congelada para ese momento, había preparado todo porque nuevamente Rosé había prometido que llegaría a tiempo a una cena, ella como siempre le creyó, tres años de matrimonio y seguía creyendo en ella, esta vez era diferente, así estuviera casada con la mejor abogada del país, ella ya tenía los documentos de divorcio.
Escuchó la puerta, y la clave ser ingresada erróneamente una y otra vez, puso los ojos en blanco, ebria por otra cena de negocios, hasta que por fin escuchó el bip que le indicaba que había logrado entrar.-Amor, he vuelto.-Rosé casi susurraba solo enfureció más a Lisa.
-Rosé, me has dejado plantada por milésima vez, ¿ahora que fue? ¿Otra cena que no podías evitar? ¿Otros clientes importantes? ¿La centésima cena para volverte socia del bufete?-Lisa no podía evitar hablar con todo el sarcasmo que jamás había usado en su vida y noto la mirada llena de furia de su esposa ante su reclamo y ni siquiera eso mino su valentía para reclamar.
-Lo se amor, se que te he fallado, déjame compensarte.-Rosé aunque estaba absorbida por el trabajo, no dejaba de amar a su esposa con locura, y la única manera que tenía para demostrarlo era conociendo cada parte de Lisa, llegó a ella y comenzó a besarla, un beso que no permitía a Lisa poner resistencia, aunque la pelinegra tampoco lo quería, a pesar de que su esposa la hacía enervar, la conocía bien, y nunca tenia suficiente de ella.
-"Al diablo, una última vez"-Pensó Lisa dejándose llevar, caminaron si detener el beso y las caricias hasta la habitación, Lisa sabía que sería la última vez que estaría con su esposa y recordaría cada caricia, cada beso, Rosé no lo noto, pero lisa derramaba lágrimas mientras la rubia repartía caricias por su cuerpo, le dolía sentir lo mismo que cinco años atrás, Rosé la trataba como cuando lo hicieron por primera vez, sabía que se sentía igual que ella, pero ahora su trabajo era más importante que su relación.
Lisa casi grito cuando Rosé la llevó al punto máximo, de aferró a la espalda de Rosé con una mano y con la otra a las sábanas cuando sintió el líquido caliente de su aún esposa dentro de ella y como escurría el entre sus piernas.-Rosé.-La llamo Lisa cuando sintió que su respiración se tranquilizaba.
-mmm.-Hizo un ruido Rosé.
-Quiero el divorcio.-Aviso la pelinegra con las lágrimas cayendo de su rostro.
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Termine con mi ex. CHAELISA (GIP)
FanfictionLisa se divorció de Rosé, ya no podía estar en una relación unilateral, lo único que le recordaba que estaba casada eran las activas noches de pasión, cuando se divorcian Lisa descubre que está embarazada de dos meses, cuando Rosé llega a un lujoso...