– ¿Qué pasa? –. Le cuestionó el dios al hechicero.
Strange se inundó de nervios así que empezó a juguetear con sus manos llenas de cicatrices a las que Loki no le quitaba los ojos de enzima ya que se había dado cuenta de aquellas marcas.
– B-Bueno es que yo... Yo... Nose como decírtelo pero t-tu me g- –. Antes de que pudiera declararse la bruja entro a la habitación del Dios.
– Lokiiiiii!! –. Exclamó emocionada la mujer pues al parecer estaba en estado de ebriedad. – Amigo mio~ te quiero muchísimo –. La pelirroja se abalanzó al dios con gran fuerza.
– Mierda... ¿Enserio estas ebria? –. Pregunto el dios aunque ya sabía la respuesta.
– ¿Que?~ n-no claro que no, Loki... ¿Quien crees que so... –. Guardo silencio ya que su estómago y su boca le estaban indicando que todo el alcohol qué consumió iba a regresar
Loki se dio cuenta de eso y abrió los ojos por la impresión y cuando Strange noto la expresión de Loki le pregunto: – ¿Qué pasa? –.
El dios se levantó rápidamente y llevo a la bruja al baño sujetando su cabello mientras esta vomitaba.
Cuando la escarlata dejo de vomitar, Loki la llevo a su cuarto y la acostó en su cama, mientras tanto Strange se había quedado en la habitación del dios, pensando en como decirle lo que sentía por el. – Perdón por eso –. Llego el pelinegro a su cuarto.
– No pasa nada –. Sonrió en hechicero, mientras que Loki se sentaba en la cama y hacia espacio para que Stephen hiciera lo mismo.
– Y que me ibas a decir? –. Pregunto mientras palmeaba la cama para que el contrario se sentará.
El mágico hombre tomo un suspiro y se sentó junto al dios en silencio, no podía hablar, las palabras se escabulleron así que tomo valor y sin pensarlo mucho, tomo la barbilla del dios y junto sus labios en un beso prendido.
Loki no se resistio, en vez de eso cerró su ojos y abrazo el cuello de Stephen para atraerlo a el, el hechicero Solto su barbilla y paso sus dos manos a la cintura del contrarío con cuidado.
Sin embargo Stephen pensó en lo que hizo y se separó rápidamente del azabache. – Lo siento... –. Fue lo único que dijo para después levantarse de la cama y retirarse. Mientras que Loki solo se quedo ahí sentado viendolo irse y tocando sus labios.
[...]
Habían pasado unas cuantas semanas y Strange se distanció de Loki, el dios no entendía porque se habían distanciado, después de varios intentos por contactar al mago el seguía ignorandolo.
– Idiota... –. Dijo en voz baja el dios mientras que estaba sentado en la sala medio deprimido.
– ¿Estas bien? –. Pregunto Barnes mientras pasaba por la sala, ya que había notado a Loki triste.
– ¿Eh? –. Volteo a ver al hombre que estaba detrás de él. –¿Que te importa? –. Volvió su vista al frente cuando identifico de quien se trataba.
– Yo solo era amable –. Respondió serió el soldado mientras que se sentaba a su lado. –¿Paso algo con Stephen? –. No le importaba del todo pero Steve le había recomendado hacer amigos o si quiera agradarle a alguien.
El dios solo lo volteo a ver con algo de enfado pero sentía algo de curiosidad, pues no sabía porque se le estaba acercando. – ¿Que es lo que quieres? Ni siquiera te conozco –. Le respondió irritado.
– James Barnes, mucho gusto –. Extendió su mano metálica sin muchas ganas. El pelinegro se le quedó viendo el brazo, ya que no había visto algo así.
Laufeyson solo tomo su mano y la examinó y Bucky se dio cuenta de eso. – ¿Que pasa? –. Le cuestionó James al notar la gran atención que le prestaba a su brazo.
– ¿Que te paso? –. Pregunto curioso Laufeyson mirándolo a los ojos.
– Emm... Es una prótesis... –. Solto su mano y se colocó un guante para que la parte metálica qué se veía se ocultara por completo.
– Se te ve muy bien –. Alago el dios.
Bucky sonrió ante este cumplido ya que no muchos creían eso. – Gracias–. Le respondió ante esa frase. – Y ¿Que paso contigo y con Strange? –. Volvió al tema principal.
– En realidad no lo sé... –. Aclaro el dios incómodo.
Bucky al notar la incomodidad del pelinegro cuando hablaban sobre ese tema decidido cambiarlo. – Oye... ¿Que te parece si vamos por un café Y recordemos un poco la ciudad? –. Le sugirio con felicidad.
El dios se sorprendió un poco ante esa propuesta pero después de pensarlo un rato acepto.
Barnes se levantó del sillón y extendió la mano para que Loki la tomara. –Vamos–. Indicó feliz.
El azabache de inmediato tomo su mano y se levantó del sillón. – Vamos–. Le confirmo con una sonrisa.
Loki se cubrió el rostro para que no lo reconocieran y los dos hombres salieron de la torre para dirigirse al parque.
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Hola! Como están? Se que me tardé mucho en subir el capítulo y me disculpo por eso, espero que les haya gustado, aunque es muy corto, pero bueno.
Gracias por darme una oportunidad. "Un destino amoroso..."
