Raven.
Una ya ni una siesta puede tomar.
Bueno, si una siesta significa ser noqueada por una rubia que al parecer es una ninfa.
Tuve que controlarme para no matarla cuando Summer me terminó de contar lo que había ocurrido.
En fin, al parecer la violencia no es la solución.
Según dicen.
Ahora estamos en un carro rumbo a un lugar lejano de la ciudad.
La rubia de nombre Layla, nos dijo que la persona que habían mandado a buscarnos es una buena cazadora.
Y que no dudaria mucho en encontrarnos si nos quedamos aquí y tampoco sería bueno usar nuestro dinero para obtener otro lugar.
Fue en ese momento que León mencionó que él conocía una cabaña fuera de la ciudad, que estaba abandonada.
Explicó que antes de aparecer en mi vida, él se quedaba ahí.
-¿Por qué estamos yendo en carro, si podemos usar nuestros poderes?—Giré la cabeza, hacia Layla que había hablado mientas miraba por la ventana.
-Número uno, no será normal ver una ninfa volando, número dos no creo que nos puedas llevar a todos, no la chica vida ni yo controlamos nuestros poderes, el perro...digo, lobo solo puede correr y León se está recuperando—Mencioné los puntos obvios, señalando a los presentes.
Miré de vuelta a León que se encontraba en el asiento de copiloto, a un lado del perro que está conduciendo.
Miré fijamente su cuello.
Cuando me desperté me dijieron que León había salido a buscar ropa para Mail.
Layla ya nos habia explicado de los peligroso que implicaba quedarnos, y seguía sin aparecer.
Y a las dos horas aparecieron, se veían agotados y León tenía sangre fresca en una marca atrás del cuello.
Parecía otro León.
Aunque preferí no preguntar, que había pasado.
Algo me decía que no quería saber.
Después de otra hora en el camino, logramos llegar a un bosque.
Y por lo que pude ver, los edificios más cercanos quedaban a cuarenta minutos.
Nos bajamos de la camioneta y nos acercamos a...eso.
-¿Qué es eso?—Puse una mueca deteniendo mi andar al igual que Summer.
-Sé que las dos vienen de comodidades, pero es lo que hay. Además después de una buena limpieza quedará impecable—León nos habló con una sonrisa pero la mueca seguía en mi cara.
Las cabañas en las historias de terror tenían mejor pinta que esto.
Le faltaba una pared a la parte de adelante, tenía un aspecto amarillento con partes de la pintura caida, no tenía puerta, y la madera rechinaba.
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Las Descendientes Del Sol Y La Luna
FantasyCuando hablan de historias mágicas lo primero que se les viene a la cabeza son lobos, vampiros, sirenas bla bla... Pero... ¿Alguna vez escuchaste la historia de sus creadores? En este mundo existen muchos dioses y diosas que gobiernan en el mundo hu...